La auditoría de la discordia

El PSOE de Moncofa instará al BLOC y al PP a que se retracten públicamente de todas las acusaciones, humillaciones e insultos que ha soportado desde el inicio de la legislatura en relación a la auditoría, puesto que ambos partidos, han podido comprobar que el informe del auditor no les proporciona la presa que buscaban en esta caza de brujas.

Sin embargo, el grupo municipal socialista estaba tan seguro que le facilitamos al BLOC, nuestro socio de gobierno, aprobar en Junta de Gobierno Local contratar la auditoría a la empresa que quisiera y además auditar lo que los nacionalistas consideraran conveniente.

La respuesta del BLOC fue un NO, justificado con la falta de confianza en los socialistas; con esta postura nos dimos cuenta que su objetivo era crucificar, a lo largo de toda la legislatura, al que según los nacionalistas suponían que surgiría como culpable.

Llegados a este punto, tanto el BLOC como el PP, siguen vendiendo humo pero el informe de la auditoría les desmonta la estrategia de buscar “a… quien haya robado que le corten las manos”, en palabras de los populares y que, por cierto, es el punto en común que en estos meses les ha mantenido eufóricos porque estaban convencidos que el resultado final de la auditoría iba a ser otro.

¡Qué lástima! Ahora tienen que desviar la atención de la ciudadanía buscando humo en otra hoguera…

Empezaron a hacer acusaciones y a dar sus propias conclusiones antes de tener el informe del auditor, apuntando que la culpabilidad de la falta de documentación era del grupo municipal socialista. ¿Y porqué no buscó el edil de Compromís-BLOC los documentos que decía que no aparecían? porque de esta manera se le acababan los argumentos que le mantenía vivo ante la opinión pública, cosa que no le interesaba.

Asusta, y mucho, decir a la ciudadanía que tienen que pagar 3 millones de euros por la macro depuradora cuando se sabe, perfectamente, como parte del órgano municipal, que es mentira. Por lo que sigue echando leña al fuego, porque claro está que el edil nacionalista no quiere nunca asumir la responsabilidad que le corresponde como miembro del gobierno local.

Compromís-BLOC sigue considerándose un grupo minoritario y no se ve en la alcaldía por eso su representante se harta de buscar responsables, de presumir de que gracias a su colectivo el Ayuntamiento es más transparente, de ser el más legal y el que más trabaja por el pueblo, bla, bla , bla… pero siempre desde la barrera.

No pueden digerir que el PSPV-PSOE de Moncofa haya gobernado las tres últimas legislaturas, con más o menos aciertos, con asuntos que pueden ser mejorados, con algunos fallos ¡SI! pero con la honradez y la lealtad que no hubiera hecho ninguno de ellos. Esto está ya más que demostrado y esta auditoría lo ratifica con creces.

Gobernar pensando en el bien común, ocupándose siempre de los problemas de todos los vecinos y, en especial en estos tiempos que estamos atravesando, por los más necesitados; mantener el IBI de los más bajos de la provincia; ofreciendo el mayor número de prestaciones sociales; apoyando a todas las asociaciones locales; y sobretodo no metiendo las manos NUNCA donde no se debe, éstas son algunas de las premisas del PSOE de Moncofa siempre que desde el gobierno local ha prestado sus servicios en beneficio de esta población, y en esta línea, pese a quien pese, vamos a seguir.

Lo que acabo de exponer es algo de lo que todos no pueden presumir y más cuando se dice desde la difícil posición de estar al frente de un gobierno municipal y no desde la oposición o cuando se tiene la llave para el resultado final de unas elecciones. Tenemos un socio de gobierno que no asume responsabilidades y que se atreve a amenazarnos con romper el pacto si nosotros no seguimos con su particular caza de brujas.

Hay que poner los pies en el suelo, dejarse de tonterías y mirar por el bien del pueblo y no por los intereses partidistas; y cuando alguna cosa no le interese que actúe pero sin amenazar porque como bien sabemos todos el tiempo pondrá, una vez más, a cada uno en su lugar.

No se pueden pedir penalizaciones a una empresa cuando la misma puede multiplicarlas por tres para que acabe pagándolas el Ayuntamiento o lo que es lo mismo el pueblo; no se puede votar en una sesión plenaria en contra de algo que, con la ley en la mano, romperá un contrato que nos puede volver a perjudicar.

Si después de dos años de formar parte del equipo de gobierno el concejal de Compromís-BLOC no se ha dado cuenta de la transparencia existente en el Consistorio o no le gusta la forma de gobernar de su socio de gobierno, es libre de tomar las decisiones que crea más oportunas pero SIN AMENAZAS porque eso parece más una rabieta de un niño de colegio malcriado que de un concejal que tiene la obligación de representar al pueblo en una institución pública.