El tránsfuga que sólo ponía placas
En Benidorm no hemos necesitado estos nueve meses para que saliera a la luz esta realidad. Ha sido un parto prematuro. Pocos días después de la moción de censura del 22 de septiembre del pasado año, Agustín Navarro ya estaba poniendo placas con su nombre. Justo todo lo contrario de la ética que imprimió Manuel Pérez Fenoll en la Alcaldía de Benidorm. Ahí está, como ejemplo más inmediato, la inauguración del Paseo de Poniente de Benidorm, la obra que ha situado a Benidorm en la vanguardia del urbanismo del siglo XXI, puesta a disposición de ciudadanos y visitantes de Benidorm siendo alcalde Manuel Pérez Fenoll y sin placa alguna que recuerde una efemérides que es fruto de la voluntad política de un gobierno del Partido Popular. ¿Alguien duda de la placa que hubiese puesto Agustín Navarro en ese paseo de haber podido hacer la moción de censura en junio?
No tuvo ningún rubor en encargar una placa con su nombre 25 días después de robar la Alcaldía. Esa infamia se puede ver en la Plaza de España, una remodelación que costó muchos meses de trabajo y que él se apropió en tres semanas. Luego se atribuyó el Parking de Tomás Ortuño, seis meses después de su asalto a la Alcaldía, colocando otra magnífica placa roja sobre fondo blanco. ¿Alguien se cree que esa obra de urbanización y excavación duró sólo seis meses?
Y algo que no es del conocimiento de muchos, pero que ha causado mucha indignación entre quienes conocen esas dotaciones: la oficina Amics, unas instalaciones que ya llevaban funcionando mucho tiempo pero que Agustín Navarro se apresuró a marcar como propia, inaugurándola y presentándola como fruto de una gestión ficticia y vergonzante.
Ahora parecen muy preocupados con la marcha de las obras del Centro Cultural de Benidorm porque no les salen las cuentas del calendario; a Navarro le quita el sueño la posibilidad de que no pueda instalar una placa que lleve su nombre con luces de neón en un proyecto del que no le preocupa el servicio que pueda brindar a la ciudad, sino lo que ello puede representar para dar lustre a su efímero paso por la Alcaldía. Que nadie se preocupe, el Centro Cultural sigue su marcha, lo inició un gobierno del Partido Popular y el Grupo Municipal del Partido Popular hará todo el esfuerzo del mundo para que pronto sea una realidad y se convierta en un nuevo motivo de orgullo para el pueblo de Benidorm.