Es hora de acabar con la desigualdad salarial
Este domingo 22 de febrero es el Día por la Igualdad Salarial de mujeres y hombres. Una igualdad que está muy lejos de conseguirse en España ya que en este momento (datos 2012), la diferencia salarial entre mujeres y hombres es del 24%, es decir, las mujeres ganan un 24% menos que los hombres por realizar un trabajo en las mismas condiciones. Para ganar lo mismo, las mujeres tienen que trabajar 84 días más que los hombres. Además las mujeres representan el 64% del total de asalariados con ganancia baja.
Las mujeres están sufriendo en “silencio” primero la crisis económica y luego las reformas del Partido Popular. Dos hechos que han truncado bruscamente los avances conseguidos durante toda la etapa democrática, que supuso una mejora de la calidad de vida de las mujeres, un reconocimiento cada vez más amplio de sus derechos y de su aportación a la sociedad.
Desde que gobierna el PP está aumentando la desigualdad entre hombres y mujeres, tanto en el acceso al mercado laboral, como en las condiciones laborales y retributivas.
Como demuestran los datos:
- Desde que llegó el PP al gobierno se han perdido 162.000 empleos femeninos, un descenso que no se puede justificar sólo por el empeoramiento del ciclo económico, sino que una parte importante se debe a la política económica del PP y principalmente a la Reforma Laboral y a los recortes en servicios sociales, donde trabajan mayoritariamente mujeres. El resultado de estos recortes es que en los últimos tres años se han perdido 200.000 empleos de mujeres en el sector público.
- España se encuentra entre los países con menor contribución femenina al empleo: sólo el 54,7% de la población femenina entre 20 y 64 años trabajaba en el tercer trimestre de 2014, 9 puntos menos que media europea y muy alejado del 74% que establece el objetivo Europa 2020. Para alcanzar ese objetivo se tendrían que crear en torno a 3 millones de empleos femeninos hasta 2020.
- Con el PP se ha intensificado el proceso de sustitución de empleo femenino a tiempo completo por empleo parcial: 392.000 empleos menos a tiempo completo y 230.000 empleos más a tiempo parcial. El tiempo parcial tiene rostro femenino: hoy el 75% de este empleo está ocupado por mujeres.
- Por primera vez en 40 años está cayendo la población activa femenina: en los últimos dos años se ha reducido en 68.000 personas, un hecho alarmante porque el mercado laboral está dejando de contar con las mujeres y se vuelven a replicar los estereotipos que sitúan a la mujer en el hogar y fuera del mercado laboral.
- El número de mujeres desempleadas se han incrementado en más de 200.000 personas desde finales de 2011 y la tasa de paro se ha situado en el 25%, 2,2 puntos por encima de la tasa de paro de los hombres. Además 1,13 millones de mujeres llevan paradas más de dos años, el 43% del total de mujeres desempleadas.
- La devaluación salarial y el aumento de la desigualdad como consecuencia de las políticas de la derecha tienen como resultado una doble discriminación por razón de género. Los trabajadores pobres son, en su inmensa mayoría, trabajadoras pobres. La pobreza tiene cara de mujer.
Todo esto ha hecho que en el Global Gender Gap que mide la igualdad entre mujeres y hombres, España haya descendido desde el puesto 12 en igualdad que ocupaba en 2011 al puesto 29 en 2014, hemos descendido 17 puestos en tres años. En participación política hemos pasado el puesto 5 en 2011 al puesto 23 en 2014, es decir, 18 puestos menos en tres años. Está claro que con el PP la igualdad entre hombres y mujeres retrocede, pero lo más preocupante es que ni siquiera está en su agenda política.
Para nosotros lograr la igualdad de género, además de un objetivo democrático para el cumplimiento de derechos fundamentales a la no discriminación, es el gran reto que tiene planteado nuestro país. Las mujeres españolas, que experimentaron durante toda la etapa democrática una constante mejora de su calidad de vida y un reconocimiento cada vez más amplio, de sus derechos y de su aportación a la sociedad, son plenamente conscientes de que la crisis económica y las políticas del PP han truncado bruscamente lo que parecían avances sin posibilidad de retroceso.
Una de las vías de solución a estos desafíos pasa por un conjunto de políticas para lograr una tasa de empleo de la mujer igual a la de los hombres y la reducción significativa de la brecha salarial. Por ello un primer objetivo de nuestras políticas es aumentar la participación de las mujeres en el mercado laboral y reducir la diferencia con la tasa de ocupación de los hombres que hoy es de 10 puntos.
Con el fin de combatir las discriminaciones directas e indirectas que provocan la actual brecha salarial apoyamos la elaboración de una Ley de igualdad salarial de mujeres y hombres. Esta ley desarrollaría instrumentos eficaces para combatir la discriminación salarial, entre ellos el refuerzo de las actuaciones de la Inspección de Trabajo y de Seguridad Social en este ámbito y la obligación empresarial de disponer de un libro registro actualizado en el que figuren, desagregadas por sexo, todas las retribuciones, cualquiera que sea su concepto, que perciben los trabajadores y trabajadoras de la empresa. Además, en desarrollo de la Ley para la Igualdad Efectiva de Mujeres y Hombres, la nueva ley de igualdad salarial incidirá en la necesidad de garantizar la igualdad en el empleo y la formación y combatir los efectos discriminatorios que generan tanto los contratos a tiempo parcial como los contratos temporales, así como las interrupciones de la vida laboral por motivos de cuidado, en el salario, las prestaciones y las pensiones de las mujeres.