Apoyo a los 23.000 empleos cerámicos
El sector cerámico castellonense necesita ayuda para superar una crisis que le ha sido impuesta y contra la que no tiene herramientas para luchar, para defender su bien ganado liderazgo en los mercados mundiales. El desorbitado y constante incremento de la factura energética ha roto la excelente evolución que estaba registrando las azulejeras castellonenses, una vez superado los negativos efectos de la pandemia sobre sus negocios. No en vano, el clúster cerámico castellonense es el cuatro mayor productor de baldosas cerámicas del mundo, y el primero de Europa. Y lo que es más importante, también es el segundo mayor exportador del planeta, solo superado por China.
La cerámica crea puestos de trabajo, crea riqueza para todos y, además, se ha convertido en la mejor embajadora de Castellón en el mundo. Un referente de calidad y superación que dignifica a toda nuestra provincia.
El sector azulejero castellonense se ha reinventado tantas veces ha hecho falta. Y antes las distintas crisis de demanda que ha sufrido en las últimas décadas, ha sabido amoldarse a las circunstancias, por adversas que fueran, y plantarle cara a la competencia desleal que llega de China, de India y de Brasil, principalmente. Empresarios y técnicos supieron buscar nuevas áreas de consumo y hasta crearon nuevos nichos de mercado para sus pavimentos y revestimientos cerámicos, que ahora no solo ocupan suelos y paredes de espacios públicos y privados, sino que incluso se han convertido en la piel perfecta de las fachadas, del nuevo mobiliario urbano y también del doméstico, y hasta recubren bancadas de cocinas y baños.
El sector cerámico de Castellón, motor de la economía provincial, necesita ayuda. Y ante la pasividad de Pedro Sánchez y Ximo Puig -a la izquierda le gusta mucho la política de brazos cruzados-, el Partido Popular alza la voz para reivindicar las medidas necesarias para que la fabricación de recubrimientos cerámicos siga siendo rentable y poner el definitivo punto final a esos 63 ERTEs que afectan a 7.233 trabajadores. No podemos esperar ni un minuto más, porque Castellón necesita una industria cerámica fuerte para garantizar un futuro de bienestar y superación, y por eso el PP se ha puesto a trabajar en busca de soluciones reales y efectivas.
El Partido Popular ha presentado una proposición no de ley (PNL) en el Congreso que insta al Gobierno a desarrollar medidas que necesita la industria para financiar los precios del gas vía crédito fiscal, menos cotizaciones y menos IVA a estas industrias. Pero, además, en el PP nos comprometemos a crear una Mesa Nacional de la Cerámica de forma inmediata para trasladar a las Cortes Generales la situación límite que vive esta industria y presentará las distintas modalidades de ayudas que han aprobado los Gobiernos de otros países europeos como Alemania o Italia mientras el PSOE sigue abandonando a la cerámica. El Gobierno de Pedro Sánchez mira hacía otro lado y le da la espalda a un sector que está pidiendo auxilio desde hace más de un año.
Nuestro presidente, Alberto Núñez Feijóo, ha visitado Castellón y ha conocido en primera persona, y sin intermediarios, la situación límite que atraviesa la industria cerámica, aunque ya era muy consciente del problema. Una situación que urge un paquete de ayudas excepcionales para paliar los costes del gas de forma inmediata. El presidente nacional del PP lo ha dicho alto y claro: “El Gobierno debe reaccionar porque o hay un precio especial para el gas o un conjunto de ayudas para repartir los costes entre las empresas y el Gobierno o la industria cerámica se apagará”.
No hay más hablar. Lo que hay que hacer es ponerse a trabajar por y para nuestro principal y más importante generador de riqueza que tenemos en la provincia. Hay que apostar por la supervivencia de un clúster que da empleo directo a cerca de 23.000 personas, pero de la que viven, a través de empleo indirecto e inducido, otras 50.000 familias.