Sant Gregori: Trabajo socialista versus derecha sin proyecto
De nuevo volemos a estar inmersos en plena campaña electoral, esta vez para determinar qué partidos acabarán formando el gobierno municipal y, por ende, qué modelo Ciudad se desarrollará en Borriana durante los próximos cuatro años. Y el asunto es serio, porque es el que nos afecta a todas y todos de manera más directa, pues el Ayuntamiento es la administración más cercana a la ciudadanía y Borriana nuestro hogar.
Es tiempo de analizar los programas electorales y, desde luego, de hacerlo sin perder la perspectiva de la actuación de los diferentes grupos políticos durante la legislatura que está a punto de terminar; pues prometer es sencillo, pero son los hechos los que acreditan la voluntad real de los partidos políticos.
Así las cosas, Borriana sabe que tiene delante muchos retos, y entre ellos hay uno especialmente trascedente para su crecimiento, la generación de empleo y turismo y todo el largo etc. que conllevará la realización efectiva del PAI Sant Gregori, que inició su andadura hace prácticamente dos décadas.
El asunto es complejo, sin duda alguna, y compleja ha sido la situación que los Socialistas hemos tenido que asumir durante este tiempo: la empresa se encontraba en concurso de acreedores y ello suponía un escollo importante para avanzar. Ha costado tiempo y, sobre todo, mucho (muchísimo) trabajo, pero la realidad es que se ha podido desbloquear por fin la situación retornándole en el pasado pleno ordinario la condición de agente urbanizador a la empresa. Para ello se han tenido que emplear grandes esfuerzos, siempre con las vistas puestas en la Ley, negociando las condiciones precisas que nos han llevado al punto de reactivar definitivamente el proyecto.
Les cuento esto porque clama al cielo que el PP se abstuviera en dicha votación (como ya hizo anteriormente en otra votación sobre la materia) ¿Es así como debe actuar el principal partido de la oposición? ¿Es ese su compromiso con un proyecto tan importante para Borriana? Las excusas baladíes no valen en un tema tan serio como éste, Sr. Fuster. Un partido con verdadera vocación de gobierno no puede abstenerse, así por la buenas, para librarse del “marrón” –perdóneseme la expresión-, sin ni siquiera plantear otras soluciones alternativas (aunque el PP, solución, jamás ha tenido ninguna). Es más, los informes son los de las misma profesional de gran prestigio que el propio PP contrató en su día, con lo que aún se entiende menos la deriva de una derecha que va en caída libre.
Aún recuerdo el slogan con el que Juan Fuster se presentaba a las anteriores elecciones, “engrandim Burriana”, y el actual con algo similar a “ahora es el momento”… ¿”engrandir” qué? ¿Cómo? ¿Qué momento? El de abstenerse y no mojarse por Borriana, continuando la estela que ya dejaron los anteriores alcaldes del PP bloqueando durante más de 10 años un proyecto tan trascendente: de órdago.
Puede prometer la luna en su programa, pero los hechos, como les decía al principio, están ahí, y no en el pasado lejano (como cuando los Socialistas, desde la oposición, en un ejercicio de responsabilidad sí que votamos a favor de la reparcelación), sino en el pasado muy reciente, que hoy es presente.
El PP no se moja, sencillamente, porque ya puso mil trabas al proyecto durante más de diez años y nunca ha creído en él, y es que no tiene ningún proyecto para Borriana, ni grande ni pequeño. Ellos y ellas son más de carpas de fórmulas uno, autobuses con la “B” de Burgos, viajes a Luxemburgo y niños en barracones… Ellos y ellas son más de abstenerse cuando hay que dar un paso al frente y ser valientes para conseguir transformar Borriana. Ellos y ellas creen que la gente olvida… y no, no es así.
Miren, no creo que sea una mera opinión, sino hechos objetivamente constatables que todos Ustedes deberían tener en cuenta mientras leen el programa electoral de turno. Háganlo con la vista y la memoria puestas en los hechos que acreditan quien cumple y quien no cumple, quien se moja por Borriana y quien prefiere hablar de naderías o simplemente mentir, porque mentir casi siempre sale gratis al principio, pero luego la factura se acaba pagando.
Sant Gregori es el paradigma que demuestra el trabajo de los Socialistas frente a una oposición que da la callada por respuesta y esconde las orejas… y ya saben que cualquier parecido con la realidad no es casual, es real, se lo dice… Javier Gual.