Impronta valenciana en el Consejo de Europa
La Instituciones europeas son esas grandes desconocidas de la ciudadanía en general, que ve esa gigantesca maquinaria burocrática en la lejanía, aunque sus decisiones las sintamos en nuestras propias carnes. En 2017 se cumplen 40 años de la adhesión de España al Consejo de Europa surgido tras la Segunda Guerra Mundial, tras la firma de su carta fundacional, el "Tratado de Londres", el 5 de mayo de 1949.
Es la única organización paneuropea compuesta por 47 estados, los 27 de la UE más el resto, excepto Bielorrusia, lo que incluye a Rusia, Turquía y Ucrania. Y en este contexto, un valenciano, el senador Pedro Agramunt ha sido reelegido para un segundo mandato al frente de la Asamblea Parlamentaria del mismo, que cuenta con la representación de diputados y senadores nacionales, 324 en total (12 titulares y 12 suplentes en el caso de España), que adoptan resoluciones para los Estados y recomendaciones al Comité de Ministros, y supervisa el cumplimiento de los compromisos de algunos estados. Una reelección que nos llena de orgullo, al reconocer el trabajo realizado al frente de tan importante Institución.
El Consejo de Europa está considerado como el guardián de los valores democráticos en el continente, siendo uno de sus principales valedores el entonces primer ministro británico Winston Churchill. Su labor prioritaria consiste en la defensa de los derechos civiles y políticos aunque también se ocupa de la defensa de los sociales y económicos según lo recogido en la Carta Social Europea.
Una intensa labor que pone en valor el Convenio Europeo para la Protección de los Derechos Humanos y de las Libertades Fundamentales, redactado en 1950. Este texto recogía en un instrumento jurídico de obligado cumplimiento los derechos enunciados dos años antes por la Declaración Universal de Derechos Humanos. En 1953 entró en vigor y desde entonces ha sido una pieza clave en la actuación de la entidad. Para ello, el Consejo de Europa cuenta con un instrumento fundamental, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. El Tribunal examina las demandas individuales presentadas por los particulares contra los estados, así como las demandas interestatales, y dicta sentencias sobre la existencia o no de violaciones de los derechos humanos.
Por ello es de destacar el intenso trabajo realizado por el Presidente de la Asamblea Legislativa, participando de forma activa en la mediación para liberar a más de una decena de presos políticos en Europa. Con su mediática iniciativa #NoHateNoFear (#NoOdioNoMiedo), respaldada no solo en Europa, también desde la ONU, y que ha contado con el respaldo del Dalai Lama, Pedro Agramunt ha sabido liderar la reacción inmediata ante las crisis desatadas en el continente, reivindicando esos valores y principios que definen el espíritu del viejo continente.
Una impronta valenciana, que junto al Vicepresidente del Grupo Popular Europeo, Esteban González Pons, son la voz de esta tierra allí donde la historia pone en valor la importancia de España en la forja de ese espíritu europeo que nos caracteriza. Magistraturas importantes en el núcleo decisional europeo que tenemos que saber valorar en su justa medida.