Un hombre bueno
Tenía ganas de levantarme una mañana y recordar a aquel D. Antonio Pastor de mis años mozos, y justamente hoy, rebuscando entre los sobres de fotos que mi hijo ha ido ordenando por fechas, he encontrado una que, no hace más de cuatro años, le hice en el Casal de la Falla D. Bosco.
Para que los lectores de estos ESBARGIMENTS tengan una pequeña referencia sobre el motivo de esta foto, les diré que está tomada en el momento en que Don Antonio nos acababa de dejar la correspondencia de la falla, y que él, con anterioridad, había recogido del apartado de correos.
Cuando le mostré la foto le dije que el título que le pondría en alguno de mis artículos, sería el de…”Probé el Wiski y me gustó”. (Vean Vds. las botellas en las estanterías de detrás de la barra del casal de la Falla) Don Antonio esbozó una sonrisa y me dijo ¡Hay que ver cómo eres, Paco!
Don Antonio era una persona que tenía “ángel”, quiero decir con ello, que era algo más que un hombre bueno.
Allá por los años 1.980/83, no recuerdo exactamente la fecha, el Director de Salesianos, D. Juan José Ganuza, convocó una “Asamblea de AA.AA.” que previamente había “preparado” con “premeditación y alevosía”, por cuanto, aquellos que estaban convocados y aleccionados por él, me vendieron la “burra”, y sin tratar ningún otro punto del orden del día, me “colgaron” el título de Presidente de los AA.AA. del Colegio Salesiano de Burriana.
Cierto es que, Juan José Ganuza, tenía mucho interés en que aquel movimiento, que hacía más de veinte años que no tenía actividad, floreciera nuevamente, y justo es reconocer que se volcó plenamente en favor de la nueva junta.
Nos habilitó un despacho dentro del propio Colegio y en él instalamos la Secretaría. Nombró Consiliario a D. Antonio Pastor que, con mucho gusto, nos facilitó listas de Alumnos que pasaron por el Colegio y que él guardaba en libretas manuscritas. Preparó cenas, previa convocatoria, con AA.AA. de otras localidades de la Provincia, así como un largo etcétera.
La fiesta de Antiguos Alumnos, se celebraba, por así haberlo considerado entre todos, el día 24 de Mayo, esto es, el día de María Auxiliadora, por cuanto hacía mejor tiempo y la gente estaba más predispuesta a acudir a los actos que organizábamos. Pero llegó D. Ángel del Barrio (q.e.p.d.) y se adjudicó, para la Parroquia, la fiesta de María Auxiliadora, desplazando a los antiguos alumnos al 31 de Enero, festividad de San Juan Bosco.
Tal circunstancia no nos hubiese importado si el mes de Enero hubiese coincidido con la Primavera, pero trasladar la Fiesta de Antiguos Alumnos, a uno de los meses más fríos del año y a mayor “inri”, cuando la mayoría de la gente se encontraba trabajando de lleno en la Campaña naranjera, nos hizo polvo, y como diríamos vulgarmente “es va cagar el gat en la mama”.
No obstante, mientras duró aquel movimiento se recuperó parte de lo esencial, esto es, coincidir con aquellos compañeros con los que habíamos compartido unos cuantos años de Colegio. Posteriormente, como consecuencia de la debilidad de aquel movimiento, nació la Falla Don Bosco.
Celebración de 25 aniversarios; Partidos de futbol sala con un equipo formado exclusivamente por Antiguos Alumnos; volver a celebrar el partido de futbol tradicional contra la Selección del Colegio el día 24 de Mayo, y un largo etcétera, fueron actividades que siempre recordaremos.
Pues bien, nuestro hombre bueno, trabajó mucho en pro de los Antiguos Alumnos y, aunque no le apetecía mucho, siempre acudía a las cenas que celebrábamos tanto en el propio Colegio como en otras Poblaciones, por cuanto así lo “mandaba” el Director del Colegio.
¡Obediencia al doscientos por cien!
Llegó el día de la visita a los Antiguos Alumnos de Villarreal y por la noche, reunidos alrededor de una “buena mesa” en un Restaurante de aquella localidad, conseguimos una asistencia de entre veinte o veinticinco Antiguos Alumnos, y con ellos, la del Director del Colegio, D. Juan José Ganuza, y por supuestísimo, la de Don Antonio Pastor.
Todos saludaban y abrazaban a Don Antonio y una vez sentados en la mesa, empezó a oírse, por medio del hilo musical del restaurante, un programa de radio de una emisora de ámbito Nacional .
Música y noticias iban alternándose mientras nosotros dábamos buena cuenta de aquella “suculenta” cena.
De momento nos sorprendió una noticia algo inusual. Un locutor de la emisora anuncia:
“Paramos nuestra programación habitual para indicarles que acabamos de recibir una llamada desde la Agencia Matrimonial del Corte Inglés, anunciándonos que acaban de atender a un Salesiano que está interesado en encontrar “novia”.
Mutis durante unos segundos y el amigo Arnal, dirigiéndose a Juanjo Ganuza, le pregunta si sabe algo del tema. Don Juanjo, a quien previamente se le había puesto sobre aviso de tan curiosa noticia, se dirige a Don Antonio Pastor y le pregunta: ¿Sabes tú algo, Antonio? ¿Qué voy a saber yo, Don Juanjo? (contestó Don Antonio) Estoy totalmente sorprendido, aunque estimo que esto debe ser un error.
Seguimos cenando con normalidad y aquella emisora continuó con su programa de música y noticias, hasta que, de momento, volvieron a parar la programación indicando:
“En estos momentos, y desde la Agencia Matrimonial del Corte Inglés, se nos amplía la noticia que hemos facilitado con anterioridad, indicándonos que el Salesiano que busca novia, pertenece al Colegio de Burriana”.
¡Joder que susto! Arnal, en un arranque patriótico se dirigió a Don Juanjo Ganuza indicándole…
¡Señor Director! ¡Que lo tiene Vd. en su casa!
Nueva negativa de Don Juanjo y nueva pregunta a Don Antonio ¿Seguro que tú no sabes nada, Antonio? Mira que tu, lo que pasa en el Colegio de Burriana lo sabes todo. Don Antonio “algo mosca” le contestó…
¡Por Dios, Don Juanjo! Le prometo que yo no sé nada”. Pero insisto en que esto es muy raro.
¡Y tan raro! Contestamos todos los demás.
Sacaron los postres y el café, y empezamos a contar anécdotas.
Don Antonio Pastor iba olvidándose del tema de aquel Salesiano que buscaba novia, pero ¡Ah Cojones! De momento vuelve a interrumpirse la programación de la emisora y, por el comentarista de turno, se anuncia lo siguiente:
¡Noticia de última hora! “Hemos podido averiguar, que el Salesiano que ha acudido a la Agencia Matrimonial del Corte Inglés para buscar novia, y que pertenece al Colegio de Burriana, es un tal D. Antonio Pastor”.
Don Antonio, dirigiéndose a todos los presentes y mirando “de reojo” y algo ruborizado a los que ocupaban las mesas de nuestro alrededor, miró atónito a D. Juanjo Ganuza y, levantándose de la silla, abrió los brazos y dijo… ¡Os prometo que yo no sé nada!
Arnal se levantó de la silla y acercándose a Don Antonio, le dio un fuerte abrazo y le dijo…
¡Pero yo sí, Don Antonio!
A partir de ese momento se contaron un montón de anécdotas del Colegio, y en especial de Don Antonio Pastor, quien escuchando con toda atención, e interviniendo más de lo que alguien se esperaba, se llenó de felicidad al comprobar que, aunque más creciditos, seguíamos siendo niños.
¡En tu memoria, Don Antonio!
Un angel que se va fer major, pero no deixa mai de ser tan noble i pur com una criatura en la mes tendra infantessa. Era un home "sense piñol"..... Tots el que el coneguerem en els salesians, en este punt estemd de accord...UN SANT