Lunes de Pascua
De rodillas ante estos todopoderosos están los Presupuestos Generales del Estado, los de las Comunidades, los de cada pueblo y ciudad y los de nuestros domicilios y pequeñas y medianas empresas. Ya lo hemos asumido: estamos presos de la deuda y el déficit.
En este reparto de miseria que nos ofrecen nuestros líderes dirigentes. A la Comunitat Valenciana le ha tocado bastante menos a que a la media de los restantes territorios que conforman nuestro país. Con un 34% menos que el año pasado. Pero dentro de los más desfavorecidos nuestra provincia de Castellón ha conseguido aun menos. Un descenso del 40%. Sin embargo, aquellos empresarios tan exigentes hace unos meses con que el AVE llegase a la capital de la provincia para el 2014, ni un segundo después, les ha entrado un ataque de sensatez y comprensión con los difíciles momentos que pasamos: Ya no reivindican nada de nada, ni siquiera el mínimo indispensable. El Partido está por encima de nuestra Sociedad.
Mientras tanto, en este valle de lágrimas en que se ha convertido España por mor de los mercados, unos se llevan un pedazo más grande de la tarta y a otros, por nuestro nulo peso específico en la política española, nos tocan las migajas.
Hoy más que un Lunes de Pascua, parece un lunes más. Un lunes al Sol, en que vuelven a hacernos la Pascua. Eso sí.