La jura de bandera
La princesa Leonor ha jurado bandera. Yo la juré allá por el 88, cuando hice la mili. Prometí la Constitución con motivo de mi toma de posesión como funcionario en el 89 y como abogado después en el 90. Creo que con eso estoy fuera de toda sospecha de no ser constitucionalista.
La verdad es que hubiera preferido jurar la bandera de la Unión Europea, esa bandera azul con un círculo de estrellas amarillas, que representa a una Europa unida. Y prometer sobre una Constitución de los Estados Unidos de Europa. Pero es lo que había por aquellas fechas. Y, ahora que estamos en un resurgir de los nacionalismos estatales y no estatales, parece que la cosa de las banderas nos sirve más para enfrentarnos que para unirnos.
Y es que en esta semana a los valencianos se nos junta el lío monumental de todos los años. Nuestro día nacional, el 9 d’Octubre, Sant Dionis, el día que Jaume I “el conquistador” entro en la Balansiya mora y la convirtió en nuestra Valencia y en que se aprobó nuestro Estatut d’Autonomía, con el día de la Hispanidad, el 12 de octubre, día nacional de España, día del Pilar y día de la Hispanidad por coincidir con la fecha en que Colón descubrió América.
Que si quieres más a papá que a mamá. Que, si te sientes más valenciano que español, o al revés. Que si las dos cosas son “per a ofrenar noves glòries a Espanya”. En fin, temas de conversación para cenas familiares y de amigos que animan el superpuente. Si no fuera que ambas dos producen un efecto de fuerza centrifuga que nos separa cada vez más del centro y hace muy difícil que volvamos a la moderación necesaria.
