Centro izquierda
Esto de militar en un partido político es como el futbol: Hay veces que estás totalmente de acuerdo y a muerte con tus colores, otras desearías dejarlo y que se apañen porque no compartes las decisiones de la directiva o del entrenador y llenas de improperios a los que van por delante. Y otras veces, las que más estás expectante desde un punto de dista crítico. Sobre todo, si eres de izquierdas y, en particular, del PSOE.
El 40º Congreso Federal del PSOE que hemos celebrado en Valencia ha sido una verdadera fiesta de la unidad, en primer lugar. Sin extremos ni estridencias. Un congreso de esos que suele gustar a la gente moderada. Pero, como no podría ser de otra manera, remarcando señas identitarias de izquierdas.
Desde el PSOE se delimita el campo de juego electoral: desde la izquierda con los pies en la tierra al centro-centro electoral de los que dicen que ellos no son políticos y que votan a quién en un momento dado les ofrece más estabilidad (económica, social o emocional).
Des pues de este congreso el panorama está quedando bastante claro: existe una extrema derecha (PP) y una ultraderecha (VOX); no existe el centro (Ciudadanos) porque se han tirado al monte para ocupar un espacio de centro-derechas que ha abandonado el PP y cuyos votantes prefieren radicalizarse con su partido antes que votar a otro; Y, por la extrema izquierda cada vez más se parece a aquellos experimentos que hizo el PCE ara unir a la izquierda más allá del PSOE, con Izquierda Unida.
El espacio moderado de centro progresista ya no está huérfano. Ha vuelto el PSOE socialdemócrata y socialista.