Por unas pensiones más justas
Hace dos semanas miles de personas de la tercera edad, se manifestaron en todas las ciudades de España, por unas pensiones más dignas; dicho colectivo suele ser menos favorecido como tantos otros, cuyo silencio se ha roto el silencio.
El pasado 17 de marzo salieron a la calle, para reivindicar unas pensiones más justas, que les puedan permitir conseguir un nivel adquisitivo decente, y vivir como personas con dignidad; se pide que esa subida entre en los Presupuestos Generales del Estado, que sea una pretensión justa, recortando otras partidas presupuestarias, que son auténticas frivolidades para un país como el nuestro.
Aquel día todos éramos pensionistas, porque ellos han trabajado treinta o treinta y cinco años cotizando, y es justo que recojan lo que han sembrado; han dado estudio a sus hijos, muchos de ellos, aún viven de las pensiones de sus padres porque están en desempleo. ¿Cómo lo ven?
El Ejecutivo no ha prometido nada, solo una mejora en el I.R.P.F. algo que a uno le parece insuficiente tratándose de un colectivo humilde, y que en ocasiones, como indica en líneas atrás siguen manteniendo a las familias de sus hijos. ¿No sería más fácil crear un Impuesto Indirecto para cubrir estas necesidades?
No hay dinero para que estas personas, que han levantado el país, que han criado a sus familias, soportando viento y marea, ¿ahora no pueden tener una pensión decente? Siempre tiene que perder el débil, y no es justo.
La Tercera Edad de las clases acomodadas, no tienen problema, viven de sus rentas, y como es lógico no son solidarios; algo vergonzoso para el ser humano; pero el Pueblo soberano sabe salir adelante, llena las calles y plazas sin más armas que su voz y la razón; esa fuerza que tienen las personas sencillas.