Autolesión por la indemnización
Es normal que aquel que tenga un bien valioso y necesario lo asegure, creyendo en caso de pérdida o desaparición de la cosa asegurada le devuelvan el dinero que pagó para adquirir otra cosa similar.
En ese Contrato hay dos partes, asegurado y asegurador, y la Buena Fe se presume Entre las partes; pero con esto de la crisis las personas pierden la cabeza y hacen auténticas locuras. Un hombre se cortó la mano fingiendo un accidente de coche y cobrar la indemnización. Según el Periódico digital Expansión.
El "personaje", dice la Sentencia, que dejó su mano en el asiento del conductor y se tumbó en la calzada fumándose un cigarro como si tal cosa. Este detalle demuestra que fue un acto perfectamente calculado.
Sí, sabemos que en tiempos difíciles, una persona hace lo que sea para sacar a su familia adelante, que los pequeños hurtos de alimentación infantil, son habituales y hasta perdonables; pero estafar a unas compañías aseguradoras, con los hechos descritos, a uno le parece una salvajada, propias de un ser anormal.
Este delito supone una estafa para las aseguradoras, no se puede dejar pasar por alto, a pesar de su sangrienta ejecución; se ignora las necesidades del sujeto que quizá sean extremas; pero no es argumento para cometer tamaña acción.
Por los hechos que figuran en la Sentencia, parece un joven muy impulsivo, que no pensó ni en su propia persona; puede que su necesitad de capital sea grande; pero si tenía un coche y unos seguros, tampoco estaría tan apurado.
Por los hechos descritos se supone que no se volverá a dar un caso similar, de tan brutal desarrollo y consecuencias para el ejecutor; por otro lado, las Compañías Aseguradoras tienen medios para conocer si un siniestro ha sido provocado por su cliente o no.
