Vividores y amorales: Cierre patronal del fútbol profesional
Pero como no quiero que la mía se vea se vea mediatizada consciente o inconscientemente por la decisión de la judicatura, escribo esta columna en la noche del domingo al lunes 28 de Marzo.
Me resulta indignante el cierre patronal de la Liga del Fútbol Profesional, y no puedo dejar de relacionarlo con los habituales chantajes de unos Sindicatos regidos, controlados y manejados por un “ganado” de vividores y amorales, que solo piensan en ellos mismos, en vez de hacerlo en los trabajadores a los que dicen representar.
Los “cabecillas” de los Sindicatos, reivindican cualquier cosa, para sacarles millones de euros al Gobierno, que finalmente nunca revierten en los trabajadores representados, sino que les sirven a ellos, para sus fines más o menos inconfesables, a fin de tener apaciguada y controlada a la masa laboral que dicen representar, evitando manifestaciones agresivas contra el Gobierno.
En el caso que nos ocupa, la Liga busca sacarle al Gobierno una cantidad de dinero determinada, exigiendo un aumento en su participación en el porcentaje de las quinielas, o les pide que les eximan de la obligación contractual que suscribieron en su día de dar un partido en abierto a la semana (cobrándolo muy bien cobrado por supuesto de los operadores que emiten en abierto), para poder venderlo al mejor postor en pago por visión.
Con lo que los primeros perjudicados son los mas desfavorecidos que no pueden pagar para ver este evento semanal, y al igual que en las “huelgas sindicales” acaban siendo perjudicados los mismos trabajadores, que dejan de percibir sus salarios de los días de huelga.
Creo que es evidente mi poca sintonía con el Gobierno socialista actual, por su mala gestión económica, política y social en los años que llevan arruinando a España, pero no por ello dejo de reconocer que en éste caso, tienen toda la razón del mundo para cerrarse en banda y no dejarse someter por el capricho egoísta, de unos dirigentes manirrotos y pésimos administradores de la mayoría de los equipos del fútbol profesional en España.
Y digo “la mayoría”, porque hay algunos Presidentes, que han hecho patente su disconformidad, y se han enfrentado abiertamente con la Liga de la que forman parte, porque aunque parezca poco democrático, las “mayorías” no siempre llevan la razón, aunque el egoísmo personal de la mayor parte así quiera hacerlo ver.
Sólo hay dos países en Europa Occidental, en los que el fútbol profesional no esté sujeto a unos códigos y leyes económicas y administrativas, que les hagan ser sujetos pasivos de auditorias fiscalizadoras, a fin de evitar los desmanes de sus dirigentes, y precisamente esos dos países son España y Albania.
Ha llegado el momento de que cambien esos parámetros, y todos los actos irresponsables en la gestión patrimonial de los equipos de las entidades deportivas, caigan con todo el peso de la Ley, sobre las cabezas de sus dirigentes, que deberían de responder con sus patrimonios personales de sus perversiones en el uso de los patrimonios que administran.
Aquí, la poca legislación que había y obligaba a descender a todos los equipos que no pagaban a sus trabajadores antes del final de cada temporada, ha ido relajándose y desapareciendo, de forma que hay bastantes equipos en el fútbol profesional en Concurso de Acreedores, compitiendo libremente y adeudando a sus jugadores y entrenadores cantidades muy importantes durante varios años, y algunos de ellos acaban por no cobrarlas por cualquier pequeño defecto de forma.
Y en vez de proceder legalmente contra esos señores directivos, que son los responsables de esa mala gestión, ahora pretenden recibir mas Fondos Públicos de una u otra forma, para seguir siendo unos manirrotos y pésimos gestores, en vez de modificar su actitud, y administrar sensatamente los muchos medios que tienen a su disposición.
Y aunque nada tiene que ver con este conflicto, también encuentro irracional el reparto de la tarta televisiva, entre los equipos de Primera División, ya que si bien los que mueven las mayores masas sociales son Real Madrid, Barcelona, ellos dos solos, no podrían nunca percibir los cientos de millones que reciben al configurarse las competiciones con todos los demás, ya que sus enfrentamientos se limitarían a dos partidos de ida y vuelta, por lo que aunque tengan que salir parcialmente favorecidos, me parece abusivo que el 35 % del total a percibir se lo lleven ellos dos, así que deberán de buscar unos criterios de reparto mas acorde con los meritos deportivos dentro de las competiciones, poniendo un baremo que tienda a hacer una competición mas abierta a todos, en vez de abrir las distancias entre los dos primeros y todos los demás.
Pero la razón fundamental de esta columna, era señalar con el dedo a los malos gestores y administradores deportivos, que buscan que entre todos les paguemos sus errores personales, en vez de responsabilizarse ellos de sus derroches y corrupciones.
Y por eso y para eso la escribo, esperando y confiando en el buen juicio de una Justicia, que deberá dictaminar en los próximos días, y tras escuchar el martes a las dos partes en litigio (la Liga del Fútbol Profesional por una parte y seis de sus equipos afiliados por otra, entre los que está el Villarreal CF), si procede la suspensión cautelar solicitada por esos seis equipos del cierre patronal, o si por el contrario es conforme a Ley.
Como no soy abogado, ni profundo conocedor del entramado de la legislación deportiva ni de la básica, no tengo criterio jurídico para emitir mi opinión, pero como simple ciudadano, y socio de dos de esos equipos, tengo que decir que en este caso particular, aplaudo al Villarreal, y lamento no compartir la postura del Valencia.
Si bien las razones son tan elementales como mis argumentos:
El Villarreal es un club bien gestionado económicamente, que defiende sus intereses, porque su Presidente es responsable, y el Presidente del Valencia, ha heredado un equipo en quiebra técnica, que trata de administrar lo mejor posible (y lo está haciendo muy acertadamente en mi opinión) que necesita urgentemente el dinero que le ofrecen sin vincularlo a objetivos deportivos, porque sabe que el futuro de su club, no puede depender simplemente de que un año no lleguen a Champions, ya que de ser así la viabilidad de la entidad, se vería seriamente comprometida.
Pero claro, la problemática de cada uno de ellos es muy diferente, y la verdad objetiva es que si se quiere una competición abierta y limpia, no se puede premiar a los despilfarradores y malos administradores económicos o deportivos, en perjuicio de aquellos que han hecho las cosas con sentido común, y sin estirar el brazo, más allá de lo que la manga de su traje les permita.
Solo faltan un máximo de 48 horas para ver en que termina este conflicto, pero por el bien de todos, espero y deseo que el próximo fin de semana veamos en nuestra vecina ciudad un apasionante Villarreal- Barcelona, y que gane el mejor deportivamente hablando, y…… espero que el mejor sea el Villarreal.
"Jamás entedí cómo los jugadores de fútbol, ganando tanto dinero, no se compran un balón cada uno y se dejan de joder" "El fútbol mitiga la fustración y despierta los instintos más primitivos"