Pedro Sánchez: ¿Hombre de Estado o estratega político sin principios?

Transcurridos los primeros diez días y tras formarse el Gobierno y tomar posesión de sus cargos todos los Ministros y sus correspondientes equipos, uno empieza a analizar las decisiones o posicionamientos de cada uno de ellos, apareciendo dudas razonables sobre el equilibrio inestable en el que van a tener que mantenerse, para contentar a todos aquellos que les dieron su apoyo en la moción de censura contra Rajoy, para permitirle alcanzar el objetivo personal que se había marcado el actual Presidente de Gobierno desde hace ya mas de dos años.

Tengo que reconocer, como ya expuse en mi columna anterior, la valiente decisión de formar un Gobierno sustentado tan solo por socialistas y aderezado por algunos tecnócratas independientes, para llevar a buen término los meses que quedan hasta final de la Legislatura.

Pero entre esos socialistas, figuran significados dirigentes del Partido Socialista de Cataluña y entre ellos aparecen sensibilidades tan distintas como contradictorias en mi opinión, como lo son las Josep Borrell (constitucionalista a ultranza y defensor siempre de una Cataluña española) y Meritchell Batet (cuyas tesis políticas son mucho más confusas) que suele expresarse con menos rotundidad, haciéndome pensar al menos a mí, que está mas cerca de las tesis separatistas matizándolas, que del encuadre de Cataluña dentro del Estado de las Autonomías.

Al colocar a Borrell como Ministro de Asuntos Exteriores, hay que entender que se quiere vender a Europa la convicción de la solidez y estabilidad de un Estado Español sin asumir riesgos excesivos.

Sin embargo al situar a la Sra. Batet al frente del Ministerio de Política Territorial, parece que se le está tendiendo una mano a todos los separatistas vascos, catalanes e incluso valencianos catalanistas (los de Compromís) abriendo un marco de negociación que alimente sus esperanzas de independentismo.

Estoy seguro de que tanto D. Pedro como su equipo Ministerial, saben como lo sabemos ya todos los españoles, por las actitudes demostradas en Cataluña y apoyadas el País Vasco por sus afines, que ya no se trata de "vender gobernabilidad en España, a cambio de dinero para Cataluña y Euskadi o para sus gobernantes", sino de iniciar el proceso definitivo de desintegración de la España que tenemos, para dar a luz otras naciones que ni lo fueron nunca ni creo que deban aparecer en el futuro.

Ya nadie se esconde y por eso Kim Torra, le exige a Pedro Sánchez un encuentro en plano de igualdad, entre el Presidente del Gobierno Español y lo que él considera el Presidente de la Inexistente República Catalana.

No sé en que términos acabará realizándose ese "vis a vis", pero lo indudable es que caso de hacerlo, tendría que quedar muy claro a todo el mundo que es un acercamiento entre el Presidente del Gobierno Español y el de la Comunidad Autónoma Catalana, teniendo muy claras las dos partes cuales son los derechos y obligaciones de cada uno de ellos, dentro del cauce Constitucional vigente, asumiendo cada uno su papel.

Hablar si, pero sólo dentro de esos parámetros y dejando siempre al Poder Judicial seguir el curso de todos los juicios en curso, sin tratar que nadie pueda evadir el peso de la Justicia, tras haber delinquido.

En el equipo de Gobierno de Pedro Sánchez, veo luces, penumbras y sombras sospechosas y a vuela pluma les diré que sin apenas haber empezado a desarrollar sus funciones me parecen excelentes Borrell, Nadia Calviño, Isabel Celáa, Magdalena Valerio, Grande-Marlasca e incluso Margarita Robles (aunque no en Defensa) por su experiencia anterior y su formación jurídica innegable.

Considero neutros y por tanto sujetos a análisis posterior, a todas las incorporaciones independientes sin antecedentes políticos notables.

Creo que tanto al torrentito Ábalos, como a Carmen Calvo y a Carmen Montón se les concede un "premio a su adhesión inquebrantable al Presidente en sus peores momentos", porque si tuviera que ser atendiendo a su gestión política, la ex Consejera de Sanidad de la Comunidad Valenciana, hubiera quedado descalificada automáticamente, porque era muy difícil haberlo hecho peor en nuestra Comunidad de lo que lo ha hecho ella.

En el Hospital Provincial de Castellón y en el Hospital de la Ribera les podrán contar bastantes temas inexplicables ya que en vez de solucionar sus problemas parece haberse dedicado a generarlos donde no los había.

Pero como todo es opinable según con el cristal que se quiera mirar, vamos a darle tiempo al tiempo, para poder formarnos una opinión del Presidente del Gobierno y de sus Ministros, aunque en definitiva el responsable final de la gestión de Gobierno, va a ser Pedro Sánchez como lo son siempre los que se eligen sus propios equipos directivos, tanto en la vida política como en la empresarial.

A unos se les juzga en las urnas, en las elecciones y a los otros se les gratifica o destituye en las empresas privadas dependiendo de sus resultados.

Lo mas triste es que mientras a los que son destituidos por malos resultados empresariales, tienen que buscarse la vida por sus propios medios, a muchos responsables políticos cuya gestión ha sido deplorable se les acaba premiando con una jubilación de oro....por mal que lo hayan hecho.

Por eso le tienen el apego tan incompresible a sus sillones, hasta alcanzar el mínimo de tiempo en la vida política para asegurarse su futuro.

De momento sigo cuestionando los principios éticos y políticos de Pedro Sánchez, porque le veo encender cirios a Dios y al Diablo.

Va a pasar unos meses endiablados enfrentándose a casi todos los que le han apoyado, porque es imposible contentarles a todos.

Carece de base política suficiente para cambiar una Constitución que hay que respetar, si no se dispone de los porcentajes legales requeridos.

Por lo tanto y aunque no me crean, me encantaría que salvara todas esas situaciones tan difíciles, airosamente, por el bien de España y de todos los españoles... no de unos cuantos.

Y llegado el momento de rendir cuentas, las urnas dictarán sentencia, no yo.

Feliz verano amigos.