Felicitaciones navideñas y balance de 35 años

Transcurridos 38 años tras la muerte de Franco, quisiera felicitar estas Navidades al Rey y a los siete Presidentes de Gobierno que hemos tenido, con un breve comentario a cada uno de ellos, en función de lo mas representativo de sus caracteres y gestiones al frente del Ejecutivo.

Al Rey, le pondría en la postal:

“Majestad, nunca en la historia de la humanidad, he conocido a nadie con vuestra suerte.

Os bastó un momento de ejemplaridad, y de ejercer vuestra autoridad con sensatez en el 23 F, para conseguir el respeto de vuestro pueblo a lo largo de 38 años.

Feliz Navidad, y que la suerte os siga acompañando a lo largo de 2014, para que nadie venga a perturbar la Paz en una España inestable.”

A D. Adolfo Suárez:

“Presidente, voy a ser breve en razón a su estado mental.

Le deseo unas Felices Navidades y un Próspero 2014 aún a sabiendas que ni lo uno ni lo otro le van a afectar lo mas mínimo.

Pero le estoy muy agradecido por su innegable capacidad para conducir el tránsito de una España totalitaria a una democrática, la cual hizo con indudable acierto.

Tiene usted suerte, de estar como está, ya que de seguir siendo completamente consciente de las consecuencias de ese tránsito quizás hoy se avergonzaría, no de lo que usted hizo, sino de lo que han hecho los que le sucedieron.

A D. Leopoldo Calvo Sotelo:

Seré tan lacónico como lo fue su Presidencia de Gobierno, breve y convulsa.

Feliz Navidad y Prospero 2014.

A D. Felipe González:

Entro usted a Gobernarnos en una situación muy similar a la actual.

Con una España conmocionada, con una crisis económica innegable, y se convirtió en la mayor esperanza que la izquierda le ha ofrecido nunca a los españoles.

En sus dos primeros mandatos, hubo más de bueno que de malo, pero en el tercero aposentado y ensoberbecidos de su poder, se olvido de los españoles para dedicarse a enriquecerse usted asegurándose el futuro del que ahora disfruta.

Su Ministro de Economía Sr. Solchaga nos hizo saber a los españoles que España era el país del mundo donde era más fácil hacerse millonario, y su ejemplo personal fue palmario.

Cambio la pana y la austeridad, por el boato y la ostentación y en ello sigue, habiendo cambiado hasta de esposa y entorno familiar.

Su suerte es innegable, por eso no necesita que le desee una Feliz Navidad y un Próspero 2014, ya que eso lo tiene garantizado en cualquiera de sus propiedades que abarcan tres continentes.

Europa, África y América que se sepa.

A D. José María Aznar:

En mi opinión ha sido usted el mejor Presidente de Gobierno que hemos tenido, ya que supo recuperar una difícil situación económica y socio-política, devolviendo a España a la élite de los países del mundo, en consideración internacional.

Se ganó muchas antipatías por su carácter autoritario, que a muchos les recordaba épocas anteriores, pero a mi me gustaba su determinación para llevar a cabo sus proyectos sin titubeos, ya que demostraba saber de donde partía y a donde quería llegar.

Ha sido él único que prometió dejar el poder tras dos legislaturas y lo hizo, saliendo por la puerta grande.

Por lo tanto y pese a que tuvo errores, como aceptar pertenecer a Consejos de Administración de multinacionales al dejar su cargo, le tengo que desear unas Felices Navidades, y un Próspero 2014 a ser posible renunciando a esas sombras que le he comentado.

A José Luis Rodríguez Zapatero:

Ha sido de lejos el peor gobernante de la España democrática, y solo aportó a su nación una dosis letal de resentimiento y odio, que estaban olvidados en el baúl de los recuerdos de los españoles.

Propició la desmembración del Estado con su tolerancia ante un catalanismo independentista que le tomó la medida desde el primer momento, al igual que el terrorismo etarra, del que ha sido de una manera consciente o inconsciente su mejor arma política.

Sólo tiene como disculpa su indigencia intelectual, y su falta de categoría política.

Ha sido el hazmerreír en todos los foros internacionales donde ha participado, y los desprecios que ha recibido de los más altos dignatarios del mundo se los ganó a pulso por su estupidez.

Como ha demostrado ser un ateo compulsivo, sé que en nada la afectara que le felicite o no las Navidades, pero mi condición de creyente me impulsa a desear que encuentre en la vida lo que haya merecido por sus actitudes.

Nada más.

A D. Alfredo Pérez Rubalcaba:

Ha sido con D. Leopoldo Calvo Sotelo él único Presidente no electo, y fruto de la contingencia infeliz de unas Presidencias mal llevadas en su fase final.

Recibió una España asfixiada y la entregó agonizante, aunque no sea imputable a usted como Presidente del Gobierno, pero si como asesor de confianza de su antecesor.

Si malo fue en su labor de Ministro de unos Gobiernos nefastos, peor es como Jefe de la Oposición ahora, lo que le va a incapacitar para poder Gobernar en el futuro.

Feliz Navidad, pero no le puedo desear un Próspero 2014, porque su prosperidad vendría de la mano de la ruina de los españoles, y eso no se lo puedo desear ni a usted mismo.

A D. Mariano Rajoy.

Llegó usted con todas las bendiciones al poder, con una mayoría absoluta que le autorizaba a poder llevar a cabo todo su programa electoral en todas sus facetas.

Podría perdonarle que se desviara en algunos aspectos económicos de su programa ante las exigencias de la Unión Europea, para poder ayudarle a sacarnos de una bancarrota inminente.

Pero nunca le perdonaré los incumplimientos en temas políticos, como la lucha antiterrorista, su abandono de los principios que marcaron su filosofía mientras estuvo en la oposición, y sus promesas de reducir unas instituciones del Estado abarrotadas de gente innecesaria, que sangra hasta lo increíble a un Estado insolvente.

Yo creía en usted, pero sus actitudes me han decepcionado totalmente.

Solo le salvo el aspecto macroeconómico de su gestión hasta hoy, y eso no me basta.

Pero puesto que es creyente, y está a tiempo de enmendar sus muchos errores le deseo unas Felices Navidades, siempre que en 2014 cambie de sentido su labor de Gobierno, y podamos volver a ser una España unida, sensata y orientada hacia un futuro estable y equilibrado que les garantice a nuestras generaciones futuras, aquello que ellos mismos sepan ganarse con su esfuerzo y su trabajo, sin tener que recurrir a lo que la izquierda ha destruido, mencionándolo continuamente:

Un “Estado de Bienestar”, que recibieron y quisieron regalar, sin decirle a la gente que eso se gana y se consigue con el esfuerzo de todos.

Así he querido despedir el Año 2013, con la esperanza de que 2014 sea mucho mejor.