Con espíritu fallero

Vaya por delante que simpatizo enormemente con todo lo valenciano y, por tanto, con el mundo fallero, pero ni soy entendido en ese arte ni en pintura fallera ni en escultura y arquitectura, por lo que mis opiniones no van a pasar de ser un análisis a lo que he visto reflejado en las más importantes.

El primer premio para el “Club 53”, me ha parecido monumentalmente una belleza y todos los comentarios que he oído estaban de acuerdo en lo merecido de su galardón.

En crítica fallera no me ha parecido la mejor, ni siquiera la segunda mejor, pero si me ha encantado su “Directori per a turistes”, traduciendo al francés e inglés una serie de frases hechas de uso común, cuando éramos niños, y algunas de ellas en la actualidad todavía.

Carlos Marín y Ramón Llopis, que habitualmente son los humoristas, se merecen una mención especial, aunque sólo sea por ello, que no es poco.

El segundo premio ha ido a parar a D. Bosco, que si bien monumentalmente quizás no lo mereciera, tiene una crítica político-musical propia de la brillantez y agudeza de quien yo me imagino.

Esas “Amistades Peligrosas” que unían al Rey y a Chávez , los “Presuntos implicados” de Fabra-Alfonso, el consabido “Bertín Osborne” adjudicado a Javier Perelló desde su más tierna infancia (fruto de la envida de los menos agraciados),esos “Dos pájaros de un tiro” parodiando a Serrat –Sabina de José Ramón y Ramon (cuando entre los dos no tiraran ni un tiro en su vida, por lo calmados y pacíficos que son, y ni siquiera serán capaces de soltar un taco indebido), ese Dúo Pimpinela, encarnado por María José y Quique Safont que también dudo mucho que se hayan enfrentado en la vida… ni siquiera cantando.

La imagen de Mercedes como La Copla Valenciana, que la honra por ser la única defensora a ultranza de nuestra lengua como era cuando las falla se iniciaron, y como sigue siendo ahora, para los humoristas falleros, ya que en todas las fallas, apenas he encontrado ningún modismo catalán, de esos que utilizan los culteranos actuales de nuestra lengua, para ir asimilándola poco a poco a lo que no debe de ser.

Y finalmente, una Mar… y Ola, que “Baila sola” en la falla y en la realidad, pero que desde luego hay que ver la marcha que les da a sus ex compañeros de grupo municipal.

La imagen de Fabra, con su avioncito de papel en cabeza de pista, completa para mi gusto la mejor crítica de falla en Burriana, y es que:

“En ingeni y galanura….
poquets com Paco Ventura”.

Es elegante y comedido hasta en la crítica, que le adjudico a ojo, sin saber si la ha hecho él, aunque lo supongo.

Finalmente, y en mi podio personal, coloco a la Falla del Club Ortega.

La de Chicharro debe de ser mejor cuando ocupa un mejor lugar, pero la vedad es que no me ha impactado especialmente en nada, así que poco puedo comentar.

Del Ortega hay que destacar una monumentalidad muy superior a la de D. Bosco y Chicharro, aunque quizás falle en detalles que yo no sé valorar.

Pero en crítica me ha encantado también.

Su Heráldica del Consistorio municipal es aguda, simpática, sin mal estilo en su presentación y algo original por lo infrecuente.

Quizás abuse de los orígenes catalanes, que sin duda serán bien recibidos por los concejales socialistas, y de muy mala gana por algunos del PP.

Otros no tanto.

Felicitar a Mari Ángeles Vicent por su genética familiar, que le augura una madurez maravillosamente placentera y longeva. Esperemos que los Suárez de origen asturiano sepan estar a la altura de las circunstancias.

Las demás fallas ya estaban a mucha distancia y no son más que la justificación que necesitamos los valencianos para reunirnos y hacer fiesta.

Quizás la última en monumentalidad y en imagen es para mí la mejor.

La Falla del Centro España.

La única que tiene un Himno propio, la querida “41”, que nos acompaña siempre y en todo lugar en los actos falleros y nos diferencia de las demás.

Sin duda la Falla más concurrida de Burriana en su local fallero, cuyas puertas están siempre abiertas a todos en el corazón de la ciudad y donde todo el mundo es bienvenido y aceptado.

Y desde aquí quiero agradecer a todos los que trabajan por la supervivencia de la Falla, (y que suelen ser siempre los mismos) por su generoso esfuerzo personal, que añaden al económico, y animarles a que sigan adelante con el mismo acierto, ya que aunque no ganemos premio alguno, estos días de convivencia, de armonía y de alegría compartida son mucho más gratificantes que el mejor de los premios, y además nos permite estar todo el año en contacto e ir incorporando nuevas generaciones en ese proyecto común.

Gracias este año al Presidente, a José Guiralt (el Metge para los amigos), que a su labor de primero de los falleros, ha unido la de Padre de la Reina, una deslumbrante Neus, que ha sabido estar a la altura de su rango, junto a Nerea y Sara.

Gracias a todos, falleritos y falleras infantiles, por haber sabido estar en todo momento a la altura, con vuestra alegría e ilusión.

Y dentro de unos momentos cuando la falla arda, que las cenizas se lleven al cielo los mejores deseos de todos vosotros, para que el año que viene, volváis a estar todos juntos, mejorando los logros en felicidad y diversión que nos ha traído este año.

Un abrazo para todo el mundo fallero y en especial para el Centro España.