Ontinyent tendrá que abonar el servicio extra de recogida selectiva a la Mancomunitat de Municipis de la Vall d’Albaida
La sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana contempla el pago de 67.782 euros al ente comarcal
El Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana sentencia a favor de la Mancomunitat de Municipis de la Vall d’Albaida en el litigio con el Ayuntamiento de Ontinyent sobre el pago del servicio adicional de recogida selectiva prestado desde 2016. De esta forma, la sala contenciosa-administrativa exige al consistorio el pago de las facturas reclamadas por el ente comarcal, que ascienden a 67.782 euros, así como los 1.200 euros de las costas judiciales.
En total, se trata de catorce facturas emitidas entre el 22 de noviembre de 2016 y el 9 de julio del 2020, correspondientes a una tercera recogida semanal de envases ligeros, y papel y cartón, que el pleno del Ayuntamiento de Ontinyent acordó retornar a la Mancomunitat el 26 de diciembre del 2019 con el voto a favor de La Vall Ens Uneix y la abstención de PP y Compromís. Así, el TSJCV corrige al Juzgado Contencioso Administrativo número 3 de Valencia que en primera instancia desestimaba la demanda presentada por el ente comarcal.
La nueva sentencia considera que “no es un hecho controvertido, que el servicio que ha originado la emisión de las facturas (la recogida con una periodicidad superior a la existente con anterioridad) ha sido prestada al referido Ayuntamiento” y, por eso, no asumir el pago “comportaría necesariamente un enriquecimiento injusto” por parte del Ayuntamiento de Ontinyent contrario a Derecho. Igualmente, el texto condenatorio fundamenta que los ingresos recibidos por la Mancomunitat de Ecoembes “no financian todo el coste del servicio” por lo que el impago supondría un perjuicio económico para el ente que aglutina los 34 municipios de la comarca.
De hecho, desde fuentes de la Mancomunitat, se muestra la “satisfacción” por esta decisión del TSJCV que “confirma el agravio cometido al ente comarcal por el Ayuntamiento de Ontinyent y lo obliga a repararlo”. Es más, de esta forma “se revierte el que pretendía el equipo de gobierno de la capital que las localidades más pequeñas asumieran un coste del municipio de mayor población cuando el sentido de la entidad es precisamente el opuesto: la solidaridad mutua y, especialmente, desde las ciudades más grandes hacia los pueblos más pequeños para conseguir una mayor unión en el seno de la Vall d’Albaida”.