Los ingresos de los productores de caqui descienden un 16% pese al aumento del 5% experimentado en los precios percibidos
El descenso de cosecha y la subida de los costes, sobre todo en tratamientos fitosanitarios para hacer frente a las plagas, son claves
Propone LA UNIÓ que se financie la lucha contra los Cotonets y unas normas oficiales de calidad comercial
Los servicios técnicos de LA UNIÓ de Llauradors han elaborado un estudio con el balance de la campaña del caqui donde se pone de manifiesto un descenso de los ingresos brutos percibidos por los productores del 16%, a pesar del incremento del 5% en los precios.
Las causas obedecen a una reducción de la producción del 20% respecto a la campaña anterior -unas 340 millones de toneladas al final es la cosecha- y a la fuerte incidencia de plagas como cotonets, negrilla o mosca blanca, y a la del hongo Mycosphaerella, por la proliferación de campos abandonados. Los costes de producción, como consecuencia del incremento y periodicidad de los tratamientos fitosanitarios, han aumentado de forma considerable y en el estudio de LA UNIÓ se calcula que lo hacen entre el 25 y 30% sobre la pasada.
Tras las subidas de los costes en esta campaña y en la anterior, ya representan de media 2,2 € por cada 100 kg de fruta producida, pero pueden llegar hasta los 3,10 €/100 kg si se repercute sobre la fruta comercial. En estos momentos pueden representar ya más del 10% de los gastos totales de cultivo, cuando por ejemplo hace tan solo cuatro años apenas representaban el 3%. LA UNIÓ insiste en que por debajo de 0,35 €/kg la viabilidad del cultivo está en serio peligro.
También se ha detectado en esta campaña un considerable aumento de fruta no apta comercialmente sobre todo fuera del ámbito de las cooperativas, lo que ha provocado que la que finalmente ha salido a los mercados se reduzca hasta en un 40% en relación a la realmente producida.
Cabe señalar que los desastrosos resultados económicos de la campaña 2019 provocaron que muchos productores abandonaran o directamente arrancaran los árboles de sus explotaciones. Así, mientras el ritmo de crecimiento de suelo cultivado de caqui en la Comunitat Valenciana durante los últimos dieciocho años ha sido del 14% anual, a partir del pasado año se rompe este crecimiento, por primera vez, reduciéndose el suelo cultivado en un 3%, tras pasar de 16.101 a 15.640 has.
Los datos indican que el precio del caqui durante esta campaña se ha situado en origen en 0,24 €/kg, es decir un incremento medio del 5% sobre la campaña anterior. Esta subida de las cotizaciones no ha compensado el descenso de la producción, de tal manera que los ingresos brutos totales recibidos por los productores en la campaña se sitúan cerca de los 80 millones de euros, que supone un descenso del 16% respecto a la campaña 2019 donde se elevaron a más de 95 millones de €.
LA UNIÓ lanza una serie de propuestas para relanzar el cultivo y una de las más importantes hace referencia a la lucha contra las plagas. Por ello insta a la Conselleria de Agricultura a que financie el control contra los diferentes Cotonets que afectan al cultivo del caqui, mediante la suelta de depredadores y parasitoides en los momentos de máxima eficacia.
Así mismo reclama la organización una normativa oficial, de obligado cumplimiento, sobre las normas de calidad comercial del caqui, de tal manera que no sea cada operador comercial quien decida arbitrariamente y, según sus intereses propios, sus normas de calidad comercial, provocando destríos abusivos de fruta como se ha comprobado a lo largo de esta campaña.