La industria valenciana prevé una lenta recuperación debido a reducción de los márgenes
El coste de las materias primas, de la energía y de una red de transporte ineficiente son algunos de los factores que hacen que la economía valenciana pierda competencia frente a otras potencias extranjeras
Se ha presentado la VII edición del Observatorio de la Comunitat Valenciana, elaborado por el Colegio oficial de Ingenieros Industriales de la Comunitat Valenciana, junto a Improven
Las empresas valencianas retoman la normalidad con cierto optimismo pero con el miedo al futuro a corto plazo. La mitad de los profesionales cree que los márgenes de sus empresas se va a reducir el próximo año, fruto de muchos factores tras los cuales se encuentra la pandemia, aunque no siempre.
Es una de las conclusiones más interesantes de la VII edición del Observatorio de la Comunitat Valenciana, elaborado por el Colegio oficial de Ingenieros Industriales de la Comunitat Valenciana, junto a Improven. Este miércoles el decano del COIICV, Salvador Puigdengolas y el socio director de Improven, Sergio Gordillo, han presentado las conclusiones de este estudio que ha marcado récord de participación: 758 encuestados entre ingenieros industriales, entidades y administraciones y con un 85% de ellos, trabajadores valencianos.
El año pasado no se hizo el observatorio porque la pandemia podría desvirtuar los datos reales y este 2021 se ha decidido retomar, explica Puigdengolas, “porque ya se ve la luz al final del túnel y es una oportunidad para conocer el sentir del sector”.
Sin embargo, pese a verse la luz al final del túnel, los márgenes se han reducido, reconoce el decano del COIICV: “La incapacidad de muchas empresas para abordar la digitalización, el aumento de los costes de las materias primas y falta de infraestructuras de transporte hacen que el nivel empresarial se vaya reduciendo”.
¿Qué pasará los próximos meses? Los encuestados creen que el crecimiento de la actividad industrial a nivel global en los próximos 12 meses, será moderado. De este modo, los encuestados creen que empeorarán los márgenes (50%), empleo (32%), empleo cualificado (23%), facturación (23%), precios (22%) y la productividad (20%).
De hecho, tal y como apunta Sergio Gordillo, “la pandemia económica no ha hecho más que empezar y está a la vuelta del verano”. El director de Improven ha querido comparar la situación económica con la gripe: “Estamos empezando a ver lo que un médico ve al principio del otoño, que empiezan a haber pacientes y sabe que va a venir la época de la gripe”. Esto se refleja también en los datos puesto que la percepción de la economía que se tiene en el corto plazo es más negativa que la que se tiene para un horizonte de 3 a 5 años.
Son varios los problemas que acusan las empresas y uno de los más grandes es, sin duda, la reducción del margen, tanto a la hora de comprar la materia prima, como de transportarla y el coste de la energía: “La encuesta fue contestada hace mes y medio, antes del cambio de la política energética”.
Otro de los factores que lastran la competitividad de las empresas españolas es la falta de apoyo administrativo y la eterna burocracia: “Los profesionales reclaman que las administraciones se impliquen, que se forme personal de calidad y que se disminuya la burocracia, que es muchas veces un freno en cualquier acción”.
Relacionado con el apoyo institucional, está la necesidad de potenciar el transporte: “Estamos veinte puntos por debajo de la media en intermodalidad. Nos encontramos en la periferia y tenemos que cubrir esos costes para llegar al mercado centroeuropeo. Es importante teniendo en cuenta que el 70% del mercado exterior es Europa”, apunta Gordillo.
En este sentido, en la encuesta se concluye la importancia de potenciar el ferrocarril ya que son conscientes del papel que juega la interrelación de las diferentes vías de conexión industrial (portuaria y ferroviaria) para también disminuir los tiempos empleados en el transporte y aumentar la eficiencia redundado en la sostenibilidad medioambiental.
Además, en esta encuesta los ingenieros y demás colectivos muestran su descontento e incapacidad de hacer frente a la transformación digital, uno de los principales retos internos que destacan en el 32,7% de los casos, y en primer lugar.
“A más industria mejor sociedad”, concluye Salvador Puigdengolas. Una idea en la que también insiste Gordillo, quien apunta al reto actual de las empresas: “Seguir apostando por tecnología, por captar talento, es decir, a las personas adecuadas y sacar proyecto a toda esa inversión”.
Por cierto, los resultados del observatorio se han presentado también este jueves en un acto institucional en el Puerto de Valencia.