"Mi ilusión era vivir y trabajar en un pueblo. Estoy feliz y no quiero irme de Sot de Chera"
Entrevistamos a Amparo Máñez, galardonada con el premio “Hacemos que las mujeres cuenten” en el marco del Día Internacional de las Mujeres Rurales
Con la emoción a flor de piel tras el reconocimiento a toda una vida, Amparo Máñez (64) de Sot de Chera recibía ayer el galardón “Hacemos que las mujeres cuenten” otorgado por el área de Igualdad de la Diputación de Valencia, con la colaboración de la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (FADEMUR) en el marco del Día Internacional de las Mujeres Rurales, celebrado este viernes 15 de octubre.
Para Amparo, que siempre quiso ser médico de pueblo, este premio significa mucho, “yo soy de Valencia, pero siempre he veraneado en Sot de Chera, y cuando me hice más mayor en vez de ser médico de pueblo quería ser médico de Sot de Chera, y al final me ha costado, porque preparé la oposición ya mayor, pero lo he conseguido”.
La premiada destaca que “el pueblo y los pacientes son maravillosos, estoy encantada y la verdad que me siento muy feliz”. En cuanto a su decisión de trabajar en el mundo rural, nos indica que “mi ilusión era vivir y trabajar en un pueblo, así que no puedo pedir más que lo que tengo, estoy feliz y no quiero irme de allí, cuando me jubile me quedaré en Sot de Chera”.
Con una población de 362 habitantes, a veces “también hago más de psicóloga que de médico”. La consulta es diaria de 8 de la mañana hasta las 3 del mediodía, “aunque hay actividad domiciliaria, actividad programada y luego la actividad diaria del paciente que se pone malo y viene de urgencia, yo solo puedo decir que cuando me llaman a cualquier hora si estoy los atiendo, aunque si no es muy urgente intentan no molestarme”.
Pero si de algo está orgullosa Amparo, es del cariño que le tiene a todos los vecinos, y también “la gente me quiere un montón, confía mucho en mí y eso es muy importante”, añadiendo que “solo puedo decir que me he volcado en ellos y ellos también me cuidan mucho, por eso estoy súper feliz de estar en este pueblo que considero el mío”.
En cuanto al galardón “Hacemos que las mujeres cuenten” nos señala que “la verdad que te den un premio por hacer lo que te gusta y te hace feliz, es algo que no entiendes, porque estás haciendo lo que te apasiona”.
Para finalizar, nos dejaba un mensaje para todas las niñas que viven en un entorno rural, insistiendo en que “la vida rural es una vida estupenda, vives unas experiencias que no vives en la ciudad y creo que las cosas están cambiando y las niñas rurales tienen mucha fuerza y hoy en día lo pueden conseguir todo, es mucho más fácil que antes”.