Ignacio Martínez: “Somos partidarios de eliminar la ideología de las aulas porque no son espacios para hacer política”
Elperiodic.com entrevista al director general de Ordenación Educativa y Política Lingüística de la conselleria de Educación
Ignacio Martínez, director general de Ordenación Educativa y Política Lingüística, ha hablado con elperiodic.com sobre las medidas implantadas por el gobierno valenciano de Carlos Mazón en materia educativa: destaca la libertad educativa, el distrito único, la gratuidad de la educación de 0 a 3 años o la recuperación de la asignatura de música en 3º de la ESO.
“Hemos iniciado el camino para la reversión”, señala Martínez, quien asegura que el gobierno de PP y Vox garantiza el aprendizaje tanto valenciano como en castellano, y para eliminar el adoctrinamiento en las aulas.
¿Cómo definiría el cambio que se ha producido en educación con el gobierno de Carlos Mazón?
Creo que lo podemos definir como un cambio decidido, firme y rápido. Creo que en estos diez meses de gobierno del cambio se han tenido muy claras cuáles eran las prioridades a abordar, y desde el primer minuto todo el equipo de la Conselleria se puso a trabajar en ellas. Ahora vemos los primeros resultados de estas nuevas políticas del gobierno del cambio.
¿Qué cambios destacaría usted en materia educativa en estos diez primeros meses del nuevo Consell?
Por el impacto positivo que van a tener en toda la sociedad valenciana, considero que las dos medidas fundamentales son la Ley de Libertad Educativa y la gratuidad de 0 a 3 años. Con la Ley de Libertad Educativa todas las familias de la Comunitat Valenciana van a poder elegir la lengua con mayor peso en la educación de sus hijos/as, y muchas personas van a ver reconocido su derecho a que se les certifique el nivel B2 o C1 de valenciano por sus estudios previos. Con la gratuidad de 0 a 3 años se van a poner a disposición de las familias 72.000 plazas en el primer ciclo de Infantil.
Libertad educativa, gratuidad de 0 a 3 años, libertad en la elección de centro... eran tres de las promesas electorales con las que el PP se presentó a las elecciones de hace un año, ¿están satisfechos con los primeros cambios logrados en educación? ¿Hacia dónde camina o fija su mirada la nueva conselleria?
Además de la ley de libertad educativa y la gratuidad de 0 a 3 años también se han cumplido otros puntos del programa electoral como el distrito único o la recuperación de la asignatura de Música en 3º de ESO, de manera que en el primer año de la legislatura hemos podido implementar buena parte de los compromisos adquiridos con los ciudadanos que depositaron su confianza en nosotros. Por este motivo, estamos satisfechos, pero somos conscientes que todavía queda mucho trabajo por hacer. Debemos desarrollar las medidas introducidas, como la ley de libertad educativa, y establecer nuevas medidas para mejorar la calidad de nuestro sistema educativo, tales como incentivar el esfuerzo y reforzar las asignaturas instrumentales.
El último informe PISA es ilustrativo de la situación, con una caída en 7 años, de 2015 a 2022, de 17 puntos en lectura y de 12 puntos en matemáticas en la Comunitat Valenciana. Mientras tanto, las medidas adoptadas por el Botànic fueron eliminar los planes del fomento de la lectura, no realizar ningún tipo de evaluación externa y no aprovechar la capacidad que la Inspección de Educación puede tener para la mejora de los centros educativos. Por este motivo, desde nuestra dirección general hemos adoptado medidas tales como garantizar cuatro horas de Matemáticas en todos los cursos de ESO, y el próximo curso iniciaremos una reforma del currículo de Primaria orientado también a reforzar la lectura y las áreas instrumentales.
¿Han conseguido revertir la situación heredada?
Hemos iniciado el camino para la reversión. El cambio ha comenzado, pero quedan cambios por hacer en otras etapas educativas. Por otra parte, hay que tener en cuenta que los resultados de las políticas educativas se plasman en los indicadores de las evaluaciones educativas a medio plazo.
En la anterior etapa del PP ya se implantó el distrito único y el Botànic lo eliminó. ¿Qué beneficios comporta el modelo del PP para las familias con la elección de centro?
Con el distrito único se amplía la oferta a todas las familias para que puedan elegir, libremente y en igualdad de condiciones, el centro de sus hijos. Antes, si una familia tenía interés en matricular a su hijo en un determinado centro, por cualquier motivo, el modelo de zonificación suponía una traba si el centro no se encontraba dentro de la zona del domicilio familiar o laboral. También, en ocasiones, se daba la situación de familias que no podían llevar a sus hijos a un centro próximo porque vivían a un lado de la línea que delimitaba la zona, y el centro estaba justamente al otro lado de la línea. En definitiva, se trata de sustituir un modelo intervencionista por un modelo de libre elección.
Compromís habla que la norma “fomenta un distrito segregador, los guetos educativos y que los centros elijan al alumnado”. De hecho, el TSJCV ha admitido a trámite el recurso. ¿Qué tiene que decir al respecto? ¿Confía en que este recurso acabe en nada y que el proceso de admisión para el curso 2025/2026 continúe según lo planificado desde la conselleria?
Precisamente, la zonificación que promovió el Botànic suponía limitar la posibilidad de que determinadas familias pudieran escolarizar a sus hijos fuera de su barrio. Eso sí es segregar y fomentar los guetos. Respecto al recurso, la admisión a trámite es una mera formalidad hasta que el tribunal entre al fondo y resuelva. No obstante, tenemos la tranquilidad de que existen precedentes en nuestra Comunitat y en otras comunidades autónomas de modelos de admisión con distrito único, que no han planteado ningún problema desde el punto de vista jurídico.
Sobre la ley de libertad educativa, el president propone equiparar en libertad e igualdad el valenciano con el castellano. ¿Se acabó el 'sectarismo' en la educación?
Nuestras dos lenguas cooficiales deben convivir en un marco de equilibrio. En este sentido, la ley de libertad educativa respeta, por un lado, que la lengua habitual del alumnado tenga un peso mayor y sea aquella en la que este aprenda a leer y escribir; mientras, por otro lado, se garantiza la presencia de la otra lengua en una proporción que va más allá del 25%, precisamente para garantizar un sistema balanceado. El objetivo final es el aprendizaje de ambas lenguas con independencia de cuál sea la lengua base, y que esta lengua base sea la elegida por la familia. De esta forma, se sustituye la política de imposición y pensamiento único por la libertad de elección y el fomento del valenciano a través de la expedición automática de certificados.
Compromís en su anterior etapa en la conselleria puso en marcha una oficina de policía lingüística, que el actual gobierno cerró. ¿Cree que han logrado frenar lo que ustedes consideran una copia del procés separatista catalán?
La eliminación de la Oficina de Derechos Lingüísticos ha sido una de las primeras medidas impulsadas desde la Conselleria, a través de la Ley de Acompañamiento a los presupuestos de 2024. Si un ciudadano consideraba vulnerados sus derechos, en este caso lingüísticos, ya existían una serie de mecanismos para poner la reclamación correspondiente, tanto en el ámbito público como en el privado. Sin embargo, la Oficina de Derechos Lingüísticos iba más allá, ya que suponía crear un órgano administrativo que señalara a aquellas administraciones o empresas privadas que pudieran haber incurrido en algún presunto incumplimiento de dichos derechos.
¿Se acabó el adoctrinamiento en las aulas o están tomando medidas para evitar que los profesores introduzcan la ideología en las aulas?
Desde la Conselleria de Educación, Universidades y Empleo se trabaja por eliminar el adoctrinamiento en las aulas. Nosotros defendemos la libertad y somos partidarios de eliminar todo tipo de ideología de las aulas porque no son espacios para hacer política.
