“La Universitat d’Estiu de Gandia tiene que virar hacia un modelo híbrido que combine presencialidad con digitalización”
Finalizada la 37 Universitat d’Estiu de Gandia, su directora, Carme Melo, realiza balance del que ha sido la primera edición virtual de su historia
El pasado viernes finalizó la 37 edición de la Universitat d’Estiude Gandia que se desarrolló del 20 al 24 de julio bajo el lema “Viraje a la sostenibilidad”. Durante esta semana, la propuesta académica de la edición ha examinado en perspectiva crítica, y con una mirada feminista, si el marco de los ODS es el adecuado para hacer frente a la crisis climática, social y sanitaria que vivimos. Han sido cinco cursos y cinco conferencias que han aglutinado más de 1300 inscripciones y a través de los cuales se ha repasado los objetivos de desarrollo sostenible desde distintas perspectivas.
Esta edición de la UEG ha sido muy distinta a la de años anteriores. La crisis de la COVID19 ha obligado a readaptar el formato, pero en palabras de la directora del Centro Internacional de Gandia de la UV, Carme Melo, “esta transición digital forzada es el mejor que le podía haber pasado en la Universitat d’Estiu de Gandia”. Este año, por primera vez, la Universitat d’Estiu ha sido gratuita “contribuyendo así a la democratización del conocimiento y materializando la vocación de servicio público de la Universitat de València”. Además, la digitalización nos ha permitido “aumentar la excelencia de nuestros y nuestras ponentes y conferenciantes mejorando, además, los criterios de sostenibilidad. La presencia física de Vandana Shiva hubiera sido difícilmente justificable desde el punto de vista medioambiental y más en una edición dedicada a la sostenibilidad del planeta, lo mismo con Sherilyn MacGregor”, concluye Melo.
Esta digitalización forzada también ha permitido contar con público de todas partes del mundo. La 37UEG ha superado las 1300 inscripciones y ha sido seguida desde varias partes del mundo: India, Brasil, Colombia, Panamá, Alemania, Inglaterra y, por supuesto, todo el estado español y el territorio valenciano. Además, todas las sesiones han sido grabadas iniciando así un archivo digital que estará al alcance del público en los próximos meses.
Por lo tanto, desde el Centro Internacional de Gandia se realiza un balance muy positivo de esta edición planteando un cambio de modelo para los próximos años. “Este cambio nos ha ayudado a ver las posibilidades que la tecnología digital nos ponía sobre la mesa. La Universitat d’Estiu tiene que ser presencial y no se tiene que renunciar a este rasgo, pero después de la experiencia de este año no queremos renunciar a las ventajas que nos ofrece la digitalización” explica Carme Melo quién concluye que la UEG tiene que andar hacia un modelo híbrido “que nos permita sacar máxima rentabilidad tanto a la tecnología como al contacto humano”.