Un estudio de Labora evidencia la brecha digital territorial entre las pymes de las zonas del interior y las de mayor urbanización
El estudio 'Digitalización y Mercado Laboral en la Comunitat Valenciana' ha analizado la implantación digital y su influencia en el mercado laboral
El estudio de Labora sobre 'Digitalización y Mercado Laboral en la Comunitat Valenciana' evidencia la brecha digital territorial que existe entre las comarcas interiores y las zonas litorales o con mayor urbanización.
Esta ha sido una de las principales conclusiones del informe que se ha presentado este jueves en Labora y ha sido elaborado por las universidades de València, Alicante y Jaume I de Castellón y ha contado con la colaboración de la CEV y los pactos territoriales por el Empleo.
En este sentido, el coordinador del proyecto, Jorge Hermosilla, ha destacado que todos los puntos abordados en este trabajo han reflejado las condiciones digitales desfavorables que presentan las zonas interiores o con mayor despoblamiento, y que resulta en una limitación de la calidad del servicio en estas áreas, así como las opciones en desventaja con las que cuentan los sectores empresariales de estas áreas.
En el estudio se ha abordado la implantación en el territorio valenciano de la cobertura digital, con el objeto de analizar los usos y el comportamiento de la sociedad valenciana con las TIC, así como el grado de digitalización de las empresas.
Sobre una muestra de 100 entidades, la gran mayoría de no más de 50 trabajadores, dado el predominio de la pequeña y mediana empresa en el territorio valenciano, el estudio constata que el grado de implantación de las nuevas tecnologías en las empresas valencianas es medio o bajo.
La directora general de Planificación y Servicios de Labora, Marisa Mezquita, ha incidido en la importancia de “lograr que las pymes no queden atrás en su adaptación tecnológica”, como una de las más importantes conclusiones del estudio 'Digitalización y Mercado Laboral en la Comunitat Valenciana', presentado esta mañana en la dirección general de Labora.
En este sentido, Mezquita ha subrayado que “la concienciación es un aspecto fundamental para que el empresariado y las personas que tiene contratadas comprendan el significado de la digitalización, así como la importancia de formarse en las herramientas y técnicas oportunas vinculadas a este proceso”.
Para tratar de alcanzar este objetivo, que requiere un gran esfuerzo a las pymes tanto de tiempo de formación como de coste económico, la directora general ha destacado que “el estudio propone medidas destinadas a avanzar en el proceso de digitalización de las empresas. Y es la administración la que desempeña un papel relevante mediante la posibilidad de otorgar ayudas económicas, de acompañamiento y diagnóstico de necesidades para mejorar la digitalización del territorio”.
El informe elaborado por las universidades valencianas también ha abordado otros puntos relacionados con la implantación de las nuevas tecnologías en la sociedad valenciana, como es el análisis de la red de datos y cobertura de telefonía móvil en los municipios valencianos, y la identificación de uso y de los niveles de utilización de las redes digitales.
Todos los puntos han puesto de manifiesto la brecha digital territorial determinada por la deficiencia en infraestructuras en varias comarcas, lo que limita la calidad del servicio, así como las desfavorables opciones que los sectores empresariales de estas áreas, especialmente las interiores, tienen respecto de zonas más urbanizadas o que se encuentran en el litoral.
Para recopilar esta información, se han realizado 8.000 encuestas, que han reflejado que las mujeres muestran un comportamiento digital más intenso y con mayor rango de usos y habilidades que los hombres, así como una mayor satisfacción en uso de internet. Asimismo, el informe revela que su uso es más mayoritario en banca, administración, ocio, vida cotidiana, comunicación, compras online, sanidad y similar en búsqueda de información y herramientas de empleo.
Los grupos de mayor edad manifiestan su predilección por conectarse desde los domicilios particulares y menos uso de las aplicaciones disponibles, como las compras online y ocio. Este segmento de la población, que reclama mayor formación en nuevas tecnologías, utiliza en mayor medida las aplicaciones sanitarias.