Un estudio americano respalda al cirujano Pedro Cavadas en su tesis sobre los casos ocultos de coronavirus en China
El médico valenciano denunció su desconfianza hacia los datos de contagios y muertes ofrecidos por las autoridades chinas al inicio de la pandemia mientras era acusado de alarmista
El cirujano Pedro Cavadas ya puso en duda la fiabilidad de los datos que en un principio reportaban las autoridades chinas respecto a los contagios y las muertes provocadas por el coronavirus, “un virus que se contagia fácilmente y que es muy agresivo”, según aseguró a los medios de comunicación cuando la pandemia estaba en plena ola de expansión.
Ahora, una investigación de la Universidad de Texas en Austin (EE. UU.) confirma la teoría de los casos ocultos de coronavirus denunciada por el doctor. Según esta investigación, cuando las autoridades asiáticas comunicaban unos 400 casos en Wuhan, lugar donde se considera que se inició la pandemia, realmente podrían haber existido más de 12.000 contagios no detectados de personas sintomáticas. La investigación, también ha confirmado que el virus estaba mucho más extendido en la capital de Hubei, semanas antes de las medidas de confinamiento en la ciudad.
Cavadas había advertido que China había confinado a una población equivalente a la española, lo que a su juicio daba señales de la gravedad del asunto. Además, alertó en su última intervención, de que si las autoridades orientales «reconocen un número de muertos y de contagiados no hace falta ser muy listo para pensar que hay como diez o cien veces más». Al mismo tiempo, denunció la falta de transparencia de China alegando que sus dos hijas eran de allí y que, por tanto, sabía del funcionamiento del gobierno central.
Para sustentar su tesis, el médico ponía el foco en las infraestructuras sanitarias que estaba levantando China ante la propagación del Covid-19: "Cuando se construye un hospital con 800 retroexcavadoras de 100 toneladas y se construye un 'megahospital' en tres semanas es que no va en broma", expresó públicamente.
Acusado de alarmista
Mientras el gobierno español daba por hecho que la epidemia tenía los días contados y apenas llegaría algún caso importado a España, el galego valenciano, expuso su preocupación, por lo que fue acusado de alarmista, de transmitir desconfianza a la población sobre la labor de la OMS (Organización Mundial de la Salud) o de buscar el morbo.
Meses después, su vaticinio se ha cumplido. El coronavirus ha afectado a millones de personas en todo el mundo y se ha cobrado la vida de un significante y elevado número de víctimas.