Una persecución policial en Elda acaba con dos detenidos por transportar más de 13 kilos de marihuana
La Policía detectó un convoy sospechoso compuesto por tres vehículos siendo el vehículo interceptado el que transportaba la droga y cerca de 3.000 euros en efectivo
Agentes de la Policía Nacional, tras una peligrosa persecución, han conseguido detener a los dos ocupantes de un vehículo que intentaron evadirse de la acción policial circulando incluso en dirección contraria por las calles de la ciudad, descubriendo que transportaban en el interior del mismo 13´5 kilos de marihuana, además de que llevaban encima 2.803 euros en efectivo.
Los hechos comenzaron a desarrollarse cuando, a media tarde, una dotación de servicio en labores de prevención de la seguridad ciudadana, detectaron a tres vehículos circulando por una de las vías principales de la ciudad a gran velocidad, saltándose las señales de circulación que había a su paso componiendo un convoy sospechoso de ocultar alguna actividad delictiva; un vehículo en la punta, otro en medio y uno en la cola.
Este modus operandi es comúnmente utilizado en el mundo delincuencial cuando tratan de ocultar alguna actividad ilícita durante su transporte, para lo que suelen utilizar varios vehículos que circulan en convoy, tal y como se ha explicado, donde dos vehículos (el que va en punta y el que hace de cola) suelen realizar labores de contra-vigilancia, así como de distracción y evasión en el caso de ser detectados por la Policía, mientras que, el vehículo intermedio, es en el que se suele transportar algún tipo de mercancía ilícita. Es por ello que los agentes sospecharon inmediatamente de este convoy.
Las sospechas de los agentes sobre la comisión de un presunto ilícito, se vieron confirmadas cuando observaron cómo, los conductores de los tres vehículos, en el instante de detectar la presencia del vehículo policial en la vía, aumentaron la velocidad y comenzaron a hacer diferentes maniobras evasivas y peligrosas, circulando en dirección contraria por las calles de la ciudad, haciendo caso omiso a las señales acústicas y luminosas del vehículo policial.
Después de haber sido perseguidos por varias calles, los tres vehículos se separan circulando cada uno por una vía, por lo que los agentes tomaron rápida y acertadamente la determinación de continuar la persecución del vehículo que ocupaba la posición intermedia del sospechoso convoy.
Así las cosas, el conductor del vehículo aceleró su marcha y comenzó a circular realizando adelantamientos prohibidos para continuar con su evasión, poniendo así en grave riesgo la seguridad vial y de los viandantes que había a su paso.
Finalmente, el vehículo tras tomar nuevamente una calle en dirección contraria saltándose todas las señales de circulación a su paso, impactó con las ruedas traseras contra el bordillo, perdiendo su conductor el control del vehículo que terminó embistiendo la terraza de un establecimiento de hostelería donde quedó bloqueado sin poder continuar la huída, momento en el que los Policías descendieron del vehículo policial y, tras reducir a los dos ocupantes del vehículo perseguido los detuvieron.
Posteriormente, los agentes descubrieron que, en el interior del maletero transportaban seis bolsas conteniendo entre todas ellas un total de 13´5 kilos de marihuana en cogollos, además de que llevaban encima 2.803 euros en efectivo, por lo que les fueron imputados los delitos de daños, delito contra la salud pública, desobediencia grave y delito contra la seguridad vial.
Asimismo, el conductor del vehículo, carecía de permiso de conducir español y el vehículo no tenía seguro de responsabilidad civil obligatorio.
A pesar de la peligrosa conducción realizada por los arrestados, no hay que lamentar daños personales, gracias a que los Policías durante la persecución fueron alertando en todo momento a través de los medios acústicos y luminosos del vehículo policial, así como utilizando la megafonía, a todos los viandantes que se encontraban a su paso, así como que el establecimiento de hostelería, afortunadamente, se encontraba cerrado en esos momentos y no había ningún cliente, aduciendo no obstante el propietario del mismo que los daños ocasionados en su terraza ascienden a unos doce mil euros.
Los detenidos, de 24 y 26 años de edad, de nacionalidades británica y marroquí, ambos con antecedentes previos, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de la misma localidad.