Devoción y miles de flores tejen el manto a la Mare de Déu en su primer día de Ofrenda
València se viste de fallera ante una multitudinaria Ofrenda con momentos y recuerdos para la posteridad
El corazón en un puño y las emociones a flor de piel de miles de falleros han acaparado todas las miradas de los valencianos en el primer día de Ofrenda a la Virgen de los Desamparados. Este acto es sin duda el momento más especial, íntimo y simbólico de las Fallas, su connotación religiosa y sentimental convierten la Ofrenda en el momento mágico de estas fiestas.
A las 15:30 de la tarde arrancaba, con las calles abarrotadas, los músicos tocando charanga y los falleros desfilaban haciendo su recorrido como manda la tradición por las calles de La Paz y San Vicente. La ilusión se dejaba ver en la cara de cada uno de ellos que con un ramo de flores y muchos acompañados por amigos o familiares guardan en su interior una historia que merece ser contada.
Una de ellas es la de Mía, que con solo 19 días, ya es fallera de nacimiento “nació el día de la Crida y antes de saber si era niña o niño mi madre ya le había comprado las telas para el traje. Yo soy fallero desde que nací y quiero que mi hija viva las fallas de la misma manera”, cuenta su padre Daniel de la Falla Josep Bayarri.
365 días es el tiempo que transcurre entre una ofrenda y otra, “para mí este trayecto significa tener algo más de una hora para hacer balance de todo lo bueno y lo malo que me ha pasado a lo largo del año y dar gracias a la Virgen por apoyarme”, relata María José de la Falla Escalante Amparo Guillén. Ella es fallera de toda la vida y la realiza junto a su amiga Rebeca, que “no sabría definir con palabras lo que siento al encontrarme con la Mare de Déu, mirarla y entregarle mi ramo”.
El momento de dar gracias y pedir un deseo
También es muy habitual aprovechar para pedir deseos a la Virgen, entre los más habituales “salud, amor y trabajo”, pero además es un día para decirle a Geperudeta “que no me he olvidado de ti, que te sigo procesando la fe como cada año y dándote las gracias por protegerme”, explica Borja de la Falla Oliveral Gloria Felicidad Tremolar. Él acompañado por su madre lleva haciendo este recorrido desde que tiene uso de razón, “solo me he perdido los años de la pandemia y lo lamenté mucho”.
Hay fechas clave en las que la Ofrenda te marca para siempre, como es el caso de Patricia de la falla del Barrio de la luz “el año pasado hice la ofrenda embarazada y solo dejó de llover en el momento en el que crucé la plaza, fue algo mágico. Este 2023 la estoy haciendo con ya con mi hija de cinco meses”. Además, las primeras veces siempre son significativas, como la de Silvia de la Falla Barraca Columbres, “es la primera vez que soy fallera y vengo aquí, es todo un sueño poder entregar el ramo hoy”.
Este viernes 17 de marzo València ha comenzado a tejer el manto de la Geperudeta gracias a los miles de falleros que han portado su ramo, donde han predominado los colores blanco y rojo por encima del resto como viene siendo habitual. En torno a las 00:00 de la noche, la Fallera Mayor Infantil de València, Paula Nieto ha entrado en la Plaza de la Virgen donde visiblemente emocionada ha entregado su ramo.
Este sábado 18 de marzo se producirá el segundo día de Ofrenda donde se completará el manto y la Fallera Mayor, Laura Mengó acompañada de su Corte de Honor, realizará este recorrido para posteriormente celebrar la famosa Nit del Foc con un castillo de fuegos artificiales.
En definitiva, ha sido una ofrenda donde la emoción y el amor a las fallas ha estado más presente que nunca y donde “gracias a Dios el tiempo ha acompañado y el sol ha brillado toda la tarde, pues no todos los años tenemos esta suerte y cuando sucede es de agradecer” explica Borja de la Falla Oliveral Gloria Felicidad Tremolar.