Cultura de la Generalitat presenta el Plan de gestión de arte rupestre en el territorio valenciano con una actualización de yacimientos rupestres
Nuestro territorio tiene contabilizados 610 yacimientos rupestres, que superan los 302 que se identificaron en 1998 cuando se declaró al arte rupestre del Arco Mediterráneo como patrimonio de la humanidad
La Generalitat ha publicado el Plan de gestión del arte rupestre en el territorio valenciano que contiene una actualización de los yacimientos y marca las líneas de actuación y condiciones que debe regir para su adecuada conservación y puesta en valor.
Esta mañana, la secretaria autonómica de Cultura y Deporte, Raquel Tamarit, la directora general de Cultura y Patrimonio, Carmen Amoraga, y el director de Bellas Artes del Ministerio de Cultura, Román Fernández-Baca, han presentado el documento a profesores, investigadores y alcaldes de las tres provincias que tienen restos de arte rupestre en sus términos municipales.
El Plan de gestión se estructura en tres partes: Análisis diagnóstico pormenorizado donde se exponen sus características, gestión actual, fortalezas y amenazas; Objetivos y estratégicas que recoge los protocolos y actuaciones sobre investigación, conservación, protección y difusión; y un Programa de acción territorial que plantea una estrategia global enfocada en acciones de protección del bien que contribuya a su vez al desarrollo territorial del entorno.
En el documento se actualiza el inventario de yacimientos rupestres. Nuestro territorio tiene contabilizados 610 yacimientos rupestres, que superan los 302 que se identificaron en 1998 cuando se declaró al arte rupestre del Arco Mediterráneo como patrimonio de la humanidad. Las manifestaciones artísticas están clasificadas en Paleolítico, Macroesquemático, Levantino, Esquemático y Artes históricos.
El Plan de gestión dedica un amplio apartado a establecer cómo debe de estar recogido el inventario rupestre y para ello propone elaborar unas fichas que deben recoger la descripción detallada del yacimiento, enclave, titularidad, datos documentales de los descubridores, protección física y legal, factores de riesgo natural y patologías, factores de riesgo antrópicos y patologías y grado de afectación.
Se establecen los protocolos de actuación destinados tanto a las acciones de conservación que pueden ser directas sobre el propio yacimiento como la limpieza, restauración, etc, y preventivas, referidas a los sistemas de cierres y vallados, acondicionamiento de los accesos y normas de actuación ante emergencias producidas por efectos naturales e incendios forestales.
También se propone la adecuada difusión y puesta en valor de los yacimientos con itinerarios, musealización de los entornos, didáctica y visitas según la categoría de cada lugar que puede ser visitado por el público, de acceso restringido al público pero abierto a los investigadores o cerrado a público e investigadores.
Otro de los apartados es el Programa de acción territorial que considera necesario que se establezcan acciones de ámbito global que beneficien a todo el territorio en general. Por ello, se propone una mayor transversalidad entre las leyes medioambientales y de patrimonio, mejor control de los usos de los lugares con arte rupestre y sus entornos, rigurosos protocolos para que hagan eficaces las propuestas del Plan de gestión, incentivar medidas de investigación, conservación, puesta en valor y educativas e impulsar programas de cooperación territorial y entre administraciones para establecer las competencias de cada institución y mejorar la efectividad de los protocolos, leyes y reglamentos sobre el arte rupestre.
El valenciano es el primer territorio del Estado que cuenta con arte rupestre en el Mediterráneo que elabora y responde al compromiso adquirido por la Generalitat en el Consejo de Arte Rupestre del Arco Mediterráneo de la Península Ibérica (CARAMPI) celebrado en Valencia el 15 de mayo de 2018 y conforme a las indicaciones del Consejo del Patrimonio Mundial.