Cullera actúa contra la procesionaria
El Ayuntamiento sigue llevando a cabo una campaña de fumigación y retirada de bolsones para prevenir y reducir su incidencia en el municipio
El Ayuntamiento de Cullera retoma la campaña de prevención y control de la procesionaria con el fin de seguir reduciendo la incidencia de un insecto peligroso que afecta especialmente a las pinadas mediterráneas.
La procesionaria en fase de oruga puede producir irritaciones, urticarias o alergias a personas o animales si se tocan sus pelos urticantes. Por ello, para prevenir y evitar los riesgos que puede provocar que las orugas puedan ser tocadas involuntariamente por personas o animales, la Concejalía de Medio Ambiente está llevando a cabo una campaña de fumigación y retirada de bolsones en los que anidan estas larvas.
Según explica el concejal de Medio Ambiente, Víctor López, «este tratamiento se está realizando mediante técnicas respetuosas con el medio ambiente, y la finalidad no es otra que prevenir y reducir la población procesionaria para evitar riesgos».
A estas acciones que se ya se están llevando a cabo, se sumará la realización de tratamientos mediante endoterapia. Esta técnica consiste en la introducción de productos fitosanitarios autorizados en la savia de los árboles mediante pequeños orificios, para que lleguen a las hojas que las orugas consumen.
Este tratamiento se aplicará selectivamente en zonas de difícil acceso y en el trayecto de la senda que va desde el Castillo hasta el Fuerte, que es una zona muy transitada a nivel senderista. Con estas acciones el Ayuntamiento de Cullera pretende reforzar la protección, seguridad y prevención a todas las personas que transiten por allí.
La Concejalía de Medio Ambiente recomienda no tocar ni los nidos ni las orugas y enseñar a los más pequeños a reconocerlas, controlar a las mascotas en los paseos con correa y vigilar a los menores.