22.000 toneladas de arena para regenerar las playas
La operación para regenerar las playas de Cullera afectadas por el temporal de enero ya está en marcha. Desde ayer, los camiones cargados con arena trabajan a destajo para devolver a la normalidad el principal escaparate turístico de la ciudad y uno de sus principales valores medioambientales.
En total, se utilizarán 22.000 toneladas de arena que se depositarán en las playas del Marenyet y del Brosquil, las dos más afectadas, según ha explicado esta mañana el alcalde de la localidad, Jordi Mayor.
Mayor ha visitado junto con el edil de Playas, Salva Tortajada, los trabajos que realiza la demarcación de Costas. La previsión es que concluyan para marzo. «Esperamos que para Fallas todo esté listo», calcula el primer edil, de modo que se logrará tener a punto las playas para Semana Santa «si no nos pilla otro temporal por sorpresa», ha matizado.
El concejal responsable de Playas ha señalado que Costas también se hará cargo de la retirada de las cañas que aún quedan en las playas y que han vuelto a acumularse como ya sucediera en diciembre, pero esta vez con menor incidencia.
Trasvase y de cantera
De las 22.000 toneladas, 15.000 se trasvasan desde la zona de l'Escollera hasta el Marenyet, mientras que en el caso del Brosquil lo que se utilizará es arena de cantera, precisa Tortajada.
El consistorio además ha negociado con Costas otras mejoras que se llevarán a cabo en la zona de los Olivos y en el Dosser una vez hayan concluido los trabajos de regeneración de las playas del sur.
Cullera también recibirá ayuda del Consell para hacer frente a los daños en materia de infraestructuras turísticas, bastante afectadas por un mar embravecido que protagonizó uno de los temporales más duros de los últimos años.
Recientemente, el municipio solicitó la declaración de zona catastrófica para poder optar a las ayudas habilitadas por las Administraciones superiores tras los episodios meteorológicos desfavorables que le han azotado este invierno.
