La Comunitat Valenciana deja la primavera más cálida desde 1950
En Alicante las lluvias han sido copiosas, pero Castellón y Valencia siguen secas pese al agua de mayo
Calor por encima de lo normal y lluvias tardías. Así ha sido la primavera en la Comunitat Valenciana, bastante seca de no ser por un mes de mayo que ha salvado los registros pluviométricos.
Así se desprende del balance de primavera dado a conocer por la Aemet (Agencia Estatal de Meteorología) en una rueda de prensa en el que también han vaticinado cómo será el próximo verano.
La Agencia recoge que la primavera climática de 2023 (de marzo a mayo), ha sido extremadamente cálida y pluviométricamente normal, aunque con diferencias entre provincias.
Las temperaturas más altas desde 1950
La temperatura media ha sido de 15’6 grados, lo que supone 1’7 grados más de lo que es normal (13.9 °C), especialmente en zonas del interior, con más de dos grados de anomalía, mientras que en la costa solo han sido un grado superiores.
Así, según el promedio de la Comunitat Valenciana ha sido la primavera más cálida de los últimos 73 años, ya que desde 1950 no hay precedentes de un trimestre primaveral tan cálido, aunque desde Aemet explican que la primavera ha cerrado sus últimos días con temperaturas más frescas, ya que el mercurio ha bajado desde el 13 de mayo.
Sin embargo, tanto marzo como abril fueron meses extremadamente cálidos. De hecho, los más cálidos de sus series históricas y se vivieron picos de calor en momentos puntuales, como la semana del incendio que arrasó el Alto Mijares.
Primavera lluviosa en Alicante; seca en Castellón y Valencia
En cuanto a las precipitación acumulada ha sido 112.6 l/m2, que es un 22 % inferior que la del promedio climático del periodo 1991-2020 (143.9 l/m2).
Aunque globalmente la primavera se podría decir que ha sido normal, ha habido una gran diferencia dependiendo de la provincia.
Así, mientras que en Alicante el carácter de la primavera ha sido húmedo, con un 35 % de superávit pluviométrico, en Castellón la primavera ha sido seca, con un déficit del 37 %, y en Valencia ha sido muy seca, con un déficit del 35 %.
Además, durante casi dos meses y medio, hasta el 11 de mayo, la primavera tuvo un carácter extremadamente seco y la precipitación acumulada casi fue nula, y solo durante los últimos 20 días de mayo se acumuló el 96 % de la precipitación de toda la primavera.
Los máximos acumulados durante el trimestre se registraron en el norte de Alicante y sur de Valencia: l'Orxa, 337.2 l/m2; Tibi (Maigmó), 319.5; Agres, 284.3; Ontinyent, 283.4; Pantano de Beniarrés, 280.6; Carrícola, 280.5; Gaianes, 276.8 y también en localidades de Castellón: Benicàssim, 275.6; Castelló de la Plana, 239.6; Sant Mateu, 236.3; la Pobla Tornesa, 218.4; Aeropuerto de Castellón, 210.7.
En el otro extremo, los mínimos trimestrales de precipitación acumulada se han registrado en el norte de Valencia: Llíria, 9.0; Benaguasil, 12.1; Massamagrell, 15.2; Bétera, 19.8; Playa de Pobla de Farnals, 22.0; Gilet, 22.2; València: 32.0.
Un año seco
Si abrimos el periodo temporal, desde octubre, los ocho primeros meses del año hidrológico 2022-2023 están teniendo un carácter seco en la Comunitat Valenciana, ya que la precipitación acumulada desde el 1 de octubre es de 306.4 l/m2, que es un 20 % inferior a la del promedio climático de referencia (381.9 l/m2).
Como ocurre con la primavera, las precipitaciones del actual año hidrológico han estado concentradas en tres temporales de lluvia, con largos periodos de sequía entre medias, especialmente el que transcurrió entre mitad de febrero y mitad de mayo, cuando durante noventa días de forma consecutiva la precipitación registrada fue nula o inapreciable en gran parte del territorio.
También como ocurrió en la primavera, en al año hidrológico hay gran diferencia entre unas zonas y otras. Hay zonas del norte de Valencia y sur de Castellón donde la precipitación acumulada es menos de la mitad de lo normal durante estos últimos 8 meses, mientras que las comarcas del Vinalopó y la Vega Baja presentan ligero superávit, aunque gran parte de la precipitación acumulada en estas comarcas lo ha sido durante las últimas semanas.
