Compromís pregunta al Gobierno por las medidas para preservar el conjunto histórico de Peñíscola de nuevos desprendimientos
El senador Carles Mulet recuerda que en 2018 se aprobó a instancias de Compromís una moción reclamando actuaciones que no han llegado
El senador de Compromís, Carles Mulet, ha preguntado hoy al Gobierno por las medidas que va a adoptar para atender la petición que, vía moción, hizo el Senado en noviembre de 2018 a instancias de la coalición para que estudiaran los desprendimientos en el acantilado de Peñíscola, tras detectarse aquel verano un cambio evidente en la estabilidad del tómbolo en la zona de cuevas y que frecuentemente visitan los deportistas náuticos.
“Dentro de sus estrictas competencias, y en aras a un modelo turístico sostenible, cultural, menos estacional, ¿qué medidas piensa adoptar el Gobierno desde su iniciativa o en colaboración con otras administraciones i implicadas, para conservar la zona de los desprendimientos del Pas de la Girafa y por lo tanto conservar el Conjunto Histórico Artístico de Peñíscola y preservar la seguridad de personas vecinas, veraneantes o visitantes?” es otra de las preguntas.
La moción aprobada en noviembre de 2018 por los grupos de la Comisión de Transición Ecológica con la abstención del PSOE, reclamaba al Gobierno que realizara en los próximos tres meses un estudio técnico-científico sobre el estado del citado acantilado y / o actuaciones necesarias para la preservación del acantilado que sostiene el casco antiguo de Peñíscola, declarado conjunto histórico-artístico, así como se que se reparasen los daños para preservar la estabilidad de la zona.
El senador popular, Alberto Fabra, que no destaca por el número de iniciativas presentadas en la Cámara Alta, en su intervención llegó a tildar de fake news la iniciativa de Compromís. Meses después el enorme bloque de piedras y tierra cayó al mar y el Consistorio de signo popular se vio forzado a reclamar medidas al respecto. Compromís recuerda que Peníscola es un importante núcleo turístico, tanto por sus playas, como por su arquitectura y su historia, con la singularidad de haber sido una de las pocas sedes pontificias, como Roma o Aviñón.
En una época donde toca replantear el modelo turístico para apostar por la especificidad, la calidad, el producto de calidad, la Administración General del Estado debe desarrollar todas las políticas que estén a su mano, dentro de sus competencias. La coalición recuerda que, en este caso concreto, las murallas y el Castillo de Peñíscola son patrimonio del Estado, Conjunto Histórico Artístico único, y estos desprendimientos, a pesar de estar en parte fuera del dominio público marítimo-terrestre, afectan a bienes de interés cultural y especialmente a la seguridad, integridad física de personas vecinas, veraneantes y residentes.