Compromís denuncia que el Gobierno "fía al azar el futuro de la citricultura valenciana"
El senador de Compromís, Carles Mulet, ha lamentado que el Gobierno "no ofrezca garantías reales o haya propuesto medidas efectivas para evitar los efectos distorsionadores por la presencia de cítricos africanos en plena temporada local" y que "nos hayan dejado claro que España va a ratificar el acuerdo con los cinco países de la comunidad de desarrollo del África Austral".
Tal anuncio deja claro la "triste" situación del estado español dentro de Europa y su claro papel subordinado a los grandes intereses de lobbies y distribuidoras "que prefieren engrosar sus cuentas como sea antes de que forma ética y adquiriendo cítricos que cumplen los mejores estándares y condiciones fitosanitarias y organolépticas que ofrece la tradición agrícola y protocolos de la principal región citrícola del estado", ha señalado el senador territorial valenciano.
En su respuesta el gobierno elude las causas por las que es interpelado por Compromís y enjabona la citricultura valenciana y española "con una producción anual superior a los 5 millones de tonelada, con una fuerte vocación exportadora, que dirige constantes esfuerzos hacia la obtención de nuevas variedades de cítricos que permitan una mejor adaptación de nuestro sector citrícola a las condiciones del mercado y cuyo dinamismo de la citricultura valenciana ha permitido alcanzar unos niveles de sanidad vegetal excelentes en relación a otros países productores". A pesar de ello manifiesta que si bien "es cierto que en 2016 las condiciones climáticas fueron desfavorables y el sector citrícola valenciano sufrió graves daños, nada indica que no sea una situación coyuntural. El sector valenciano está desarrollando una ventaja comparativa importante y no cabe pensar que el acuerdo suscrito con los 5 países de la Comunidad de Desarrollo de África Austral (por sus siglas en inglés SADC) vaya afectar negativamente a este sector".
Para Mulet "nos encontramos ante un Gobierno cegato o que no quiere ver lo que han denunciado las organizaciones agrarias con rabia e incredulidad y es que a finales de enero, con la temporada valenciana muy avanzada, grandes cadenas de alimentación todavía seguían vendiendo naranja africana", una práctica abonada por los 8 eurodiputados del PP que votaron a favor de la entrada de cítricos sudafricanos en la UE y las 9 abstenciones del PSOE y que pone en peligro directamente ingresos por valor de 124 millones de euros para el sector citrícola valenciano. "Una jugada maestra e inexplicable y que solo fían al azar de la meteorología y los precios, mientras naranjas que compiten en otra división podrán seguir comercializándose en Europa y hundiendo nuestros precios algo que, dicen, vigilarán", ha concluido.