Alumnado de TSEAS de Florida Universitària promueve la integración social a través del deporte
Florida Universitària y COPAVA han vuelto a darse la mano en otra edición más del Encuentro de Pruebas Adaptadas, celebrada en el pabellón deportivo del Campus de Catarroja. Una nueva oportunidad para entrelazar educación, compromiso e inclusión social desde el deporte, como herramienta para trabajar el bienestar físico, pero también el emocional.
El alumnado del Ciclo Formativo de Grado Superior en Enseñanza y Animación Sociodeportiva (TSEAS) ha vuelto a liderar esta sesión de actividades físico-deportivas dirigida a personas con diversidad funcional y movilidad reducida, asumiendo el cargo de monitor/a. Un circuito dividido en seis pruebas con diferentes niveles de dificultad, utilizando técnicas deportivas que incluyeron disciplinas de baloncesto, hockey, colpbol, hándbol, futbol y obstáculos; promoviendo la iniciación polideportiva de las personas participantes, con el objetivo de estimular su psicomotricidad.
La colaboración de COPAVA, que repite con Florida Universitària tras los positivos resultados de las pasadas ediciones, fue esencial para llevar esta iniciativa a la realidad. La entidad, que coordina centros ocupacionales para personas con diversidad funcional, trabajó conjuntamente con el centro universitario ofreciendo asesoramiento tanto a profesorado como alumnado. En su conjunto, fueron siete centros ocupacionales los que asistieron al Campus de Catarroja para participar en este encuentro deportivo que implica «un interesante choque de realidades», como lo expresaba Irene Costa, auxiliar de programas y actividades de COPAVA.
Y la fotografía que describía era «insuperable». «Ver a jóvenes acompañando, animando y ayudando a personas que hasta la fecha no entraban en su perspectiva, es muy emocionante». Y para los usuarios y usuarias de COPAVA, la jornada también es muy satisfactoria. «Cambian su rutina con nuevos estímulos, viven experiencias enriquecedoras y comparten actividades con personas de otros centros en un ambiente cercano, social y muy humano mientras practican deporte», concluye Costa.
Con el Encuentro de Pruebas Adaptadas se pone punto final al módulo de ‘Actividades Físicas para Personas con Diversidad Funcional’ que imparte el docente Jorge Mateu, y que además trabaja en la gestión y tratamiento de actividades enfocadas a la tercera edad y a personas en riesgo de exclusión social. Además de poner en práctica los conceptos de aula, esta iniciativa abre para el alumnado nuevas posibilidades para su futura inserción laboral, reconociendo las funciones de la figura del monitor deportivo que cada vez está más extendido en centros ocupacionales. Perfiles que promuevan la actividad física y el deporte «como estrategia de integración y autonomía», destacaba Mateu.
Para el alumnado, participar en este proyecto supone un punto de reflexión que les ayuda «a poner los pies sobre la Tierra». Y describen el deporte como el perfecto canal «para llegar a la mente y el corazón». No solo forman comunidad y contribuyen socialmente, sino que adquieren la experiencia y visión que les facilitará en su futuro profesional, «romper barreras y tender puentes hacia una inclusión real y efectiva».