Los hornos de Castellón elaborarán más de 500 kilos de dulces de Todos los Santos
El Gremi de Forners de Castelló son optimistas con las ventas porque con la pandemia las familias celebrarán en sus casas esta festividad
El 1 de noviembre es la festividad de Todos los Santos, una de las fechas más señaladas en el calendario en la que tradicionalmente se guarda memoria a los seres queridos que nos han dejado. Pero también es una festividad en la que los dulces típicos llenan los hornos tradicionales valencianos.
En la provincia de Castellón, los panellets, los huesos de santo o los tradicionales ‘pastissets’ llenan durante estos días las vitrinas de los hornos artesanales. Todos estos productos convivirán con los productos de Halloween que se han ido consolidando en los últimos cinco años, los ‘pastissets’ de calabaza, la coca de naranja o la coca de Castelló.
Tradicionalmente, los panellets han tenido forma redonda, pero como novedad este año se elaborarán panellets en forma de frutas de temporada como la naranja, la manzana, la calabaza o las fresas, con la intención de dar color y alegría a la mesa.
Este año, los panaderos castellonenses elaborarán más de 500 kilos de estos tradicionales dulces. Pese a la situación actual de crisis sanitaria, desde el Gremi de Forners de Castelló son optimistas. “No sabemos si llegaremos a los niveles de 2019, pero con la situación actual las familias saben que tendrán que celebrarlo en casa y están volviendo a los hornos”, comenta José Miró, Mestre Major del Gremi de Forners de Castelló.
Según Miró, “los hornos artesanos son espacio de esperanza e ilusión para todos los castellonenses”.
Las nuevas tecnologías se cuelan en los hornos
Con la pandemia, muchas personas están realizando los encargos por teléfono y WhatsApp. E incluso piden cita previa para recoger los tradicionales dulces evitando así las aglomeraciones, evitando colas, haciendo caso a las recomendaciones de Sanidad y que el aforo sea el adecuado.
Muchos hornos castellonenses se han puesto a trabajar vía online para recibir sus encargos. Y es que lo tradicional no está reñido con las nuevas tecnologías.