Amparo Marco apuesta por un pacto de Estado para mejorar la financiación de los Ayuntamientos

La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, ha participado esta tarde en una mesa redonda sobre la financiación local y las propuestas de reforma junto a Manuela Carmena, alcaldesa de Madrid; Xulio Ferreiro Baamonde, alcalde de A Coruña; Dolors Sabater Puig, alcaldesa de Badalona; Gerardo Pisarello Prados, primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona y Ramón Vilar Zanón, concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Valencia, institución que ha organizado la jornada.

La alcaldesa ha explicado que "el ayuntamiento es el primero en dar la cara, es la primera administración a la que acude el ciudadano. Los vecinos no entienden de competencias entienden de soluciones y por eso tenemos que tener una mejor financiación" ha explicado. Por ello, ha abogado por explorar todas las vías y que "se nos dé libertad para impulsar una política fiscal progresiva donde se combatan las injusticias, una política fiscal valiente para que paguen más los que más tienen. Tenemos que saber en qué casos podemos aplicar exenciones y como incentivar políticas que potencien el uso de viviendas vacías".

Marco ha indicado que el debate de fondo es el de aclarar la realidad sobre los servicios prestados a los ciudadanos por las diferentes administraciones. "Y una vez aclaradas las responsabilidades de cada administración, será necesario establecer una nueva financiación local basada en dos elementos principales: un sistema fiscal propio y las transferencias incondicionales del Estado y la comunidad autónoma. Todo ello teniendo en cuenta el tamaño de los municipios, ya que no es lo mismo la prestación de servicios en una gran ciudad que un municipio pequeño".

Para la máxima representante del Ayuntamiento de Castellón, el nuevo sistema de financiación local debe dotar a las entidades locales de los instrumentos y mecanismos financieros adecuados que les permitan adaptarse a la realidad social y dar cumplimiento a los compromisos con la ciudadanía". Y para conseguirlo hay dos exigencias básicas: la suficiencia financiera y la autonomía municipal, ha añadido.

En cuanto al sistema tributario municipal, Amparo Marco ha señalado que es evidente que la propiedad inmobiliaria debe seguir siendo la base de la fiscalidad municipal, pero ha añadido que son muchas las propuestas a debate: que la participación de los tributos del Estado se sitúe en torno al 30% de los ingresos municipales (en los últimos años ha decrecido la aportación y se ha de compensar con un mayor incremento de la presión fiscal); reformar el sistema tributario local a través de la eliminación de tributos ineficientes (impuesto de vehículos) o con falta de seguridad jurídica (plusvalías); flexibilizar la regla de gasto y no penalizar a los ayuntamientos que quieran dedicar más recursos a las políticas sociales, y, por último, que se permita utilizar el superávit municipal con más libertad, "no solo para amortizar deuda o para inversiones financieramente sostenibles ya que se podría dedicar a gasto social o empleo".

Otras propuestas que ha lanzado la primera edil han sido: mejorar la gestión y racionalizar los costes (de esa manera aumentarán los recursos propios para costear obras y servicios); aclarar las competencias de cada institución y no duplicar los servicios prestados a la ciudadanía; no asumir competencias "impropias" de otras administraciones que no vengan acompañadas de la correspondiente financiación (caso de los Servicios Sociales en los ayuntamientos); repensar para qué sirven las diputaciones ya que reciben el 90 de transferencias del Estado y luego dejan fuera a los municipios de más de 20.000 habitantes; más autonomía municipal a la hora de ajustar la fiscalidad a la realidad de cada localidad y también la tasa de reposición (por ejemplo, policías locales y bomberos); que haya transferencias de otras administraciones no condicionadas o un mayor control de la bolsa de fraude tributario.

Para finalizar, Amparo Marco ha afirmado que "hay que abrir un diálogo entre todas las administraciones implicadas, avanzar en la segunda descentralización y propiciar un pacto de Estado de financiación. La gran beneficiada será la ciudadanía, porque con una fiscalidad más justa tendremos mejores servicios y una mejor calidad de vida".