El Ayuntamiento de Castalla aprueba los trámites para la construcción de la nueva depuradora

El Ayuntamiento de Castalla ha aprobado el proyecto para la construcción de una nueva depuradora, que dará servicio a la urbanización Castalla Internacional, por un importe de 411.040’17 euros. Esto permite que el Consistorio pueda iniciar la licitación de las obras de la que es una demanda histórica de los vecinos de la zona. La nueva infraestructura dotará además a los vecinos de esta urbanización con unos equipamientos que necesita. El Alcalde de la ciudad, Antonio Bernabeu, ha manifestado que “el equipo de gobierno ha peleado por llegar a este punto desde el año 2015, cuando empezamos a tramitar todos los documentos necesarios para poder construir la depuradora”.

En el último Pleno municipal, celebrado el pasado 27 de mayo, se aprobaron tres puntos clave para que el proyecto se convierte en una realidad. Por un lado, se capacitó al Ayuntamiento como agente urbanizador, por otro, se dio luz verde a la nueva solución técnica –que pasa de ampliar la depuradora existente a construir una nueva- y, por último, la aprobación del proyecto del colector de saneamiento y EDAR. El Consistorio ha tomado la decisión de utilizar 853.121,10 euros del aval para afrontar las tres infraestructuras pendientes que necesita la segunda fase de Castalla Internacional, esto es: la construcción de la nueva depuradora, la habilitación de dos zonas verdes y la última capa de rodadura de las calles.

Toda vez que se hayan cumplido estos pasos, el Ayuntamiento podrá recepcionar la segunda fase de Castalla Internacional, y los vecinos de la zona obtener las licencias de primera ocupación que les capacita para contratar luz y agua en sus viviendas. La concejala de Urbanismo, Raquel Guill, destaca la importancia del proyecto porque “con estas infraestructuras la gente que vive en Castalla Internacional tendrá las mismas condiciones que el resto de vecinos de Castalla”. Además, sigue la responsable de Urbanismo, “la depuradora actual tiene unos costes de mantenimiento muy elevados”.

El proceso se ha alargado durante cuatro años porque para impulsar el proyecto de la depuradora se ha tenido que modificar el Plan General y redactar un Plan Especial. Los terrenos originales estaban calificados como “de especial protección agrícola” y ahora están dentro de la “red primaria de equipamiento dotacional con uso de infraestructuras y servicios urbanos”. Entre el 2015 y el 2018, se ha realizado gran cantidad de trámites con las administraciones competentes hasta que ha llegado la aprobación definitiva.

Ahora, después de que Conselleria haya calificado el proyecto como de ‘utilidad pública’, el Ayuntamiento de Castalla tiene luz verde para ocupar el terreno y comenzar a construir la depuradora.