Carlos Mazón hace un balance positivo de sus cien días de gestión y la oposición le acusa de “gobernar solo para los ricos”
Sesión de Control al president de la Generalitat llena de reproches del PSPV y Compromís por las medidas llevadas a cabo por el gobierno del PP-Vox y también con momentos de gran tensión
Ha sido una sesión tensa y dura. Ya lo vaticinaba el comienzo de la misma, con el sistema de votaciones estropeado, lo que iba a obligar a sus señoría a votar a mano alzada. Mal preludio para la sesión de control al president de la Generalitat tras cumplir cien días de gobierno. Aunque posteriormente la sesión ha mejorado.
El primero en intervenir ha sido el síndic popular Miguel Barrachina, quien le ha desplegado la alfombra roja a Mazón con elogios sobre los logros conseguidos y recordando la “mala gestión” del gobierno del Botànic: “La discriminación del gobierno nacional y desidia del anterior gobierno autonómico generan pobreza entre la población valenciana”.
Barrachina ha enumerado los índices que demuestran esa afirmación, como los 1,3 millones de valencianos en riesgo de pobreza que se alcanzaron el año pasado o el récord nacional en recortes en dependencia.
Carlos Mazón: “Estoy contento”
Mazón ha aprovechado su turno para enumerar las razones por las que está “contento” en lo que a su gestión se refiere: “El nuevo Consell elegido por los ciudadanos ha revertido el Gobierno más caro, más sectario, con más enchufados y con mayor presión fiscal de la historia”.
También ha enumerado algunas medidas estrella, como la supresión del impuesto de sucesiones y donaciones, la reducción del gasto político o “grasa política” como la suele denominar, también la aprobación del Anteproyecto de Ley de Medidas Fiscales de 2024 que contempla beneficios fiscales para las rentas medias y bajas, la creación de la Mesa del Agua de la Comunitat Valenciana, la ampliación presupuestaria de la Renta Valenciana o la reversión de los hospitales de Manises y Denia, “que por primera vez se va a hacer de una manera seria, con diálogo social y consensuada con la empresa”.
Rebeca Torró y la polémica con el guiño
Uno de los momentos más tensos de la sesión se ha producido cuando, tal y como les ha contado elperiodic.com, la síndica socialista Rebeca Torró ha acusado a Carlos Mazón de guiñarle un ojo en la anterior sesión, “algo inapropiado y machista”: “Seguro que a Baldoví no se lo guiñaría”.
Además, la síndica ha lamentado que “mientras Mazón firma Pactos de la Vergüenza, Pedro Sánchez consigue acuerdos progresistas que dan respuesta a los problemas reales de los valencianos”. La dirigente socialista lamenta que en poco más de tres meses, el PP “ha tirado por tierra la reputación valenciana que tanto se ha trabajado por levantar durante los últimos 8 años después de dos décadas de corrupción del PP al frente de la Generalitat”.
Compromís pide a Mazón ayudas en lugar de deducciones
En el turno de Compromís, el síndico Joan Baldoví también ha sido muy duro con Mazón, aunque le ha propuesto que de entre las medidas fiscales que se están sacando adelante, convierta las deducciones en ayudas directas y así les llegarán a todos: “Le invito a que vaya a un colegio del barrio de Carrús y pregunte cuánta gente hace la declaración de la renta. Los padres no la hacen porque muchas veces no llegan al mínimo, por lo que no se podrán deducir nada. Por eso le pido que convierta las deducciones en ayudas directas”.
Mazón ha cambiado el tono que mantenía con los síndicos socialistas y se ha mostrado abierto a estudiar la cuestión: “Usted y yo sí podemos hablar”.
Por último, Ana Vega, síndica de Vox -socio de gobierno de Mazón- ha pedido al president que no permita a Sánchez tratar a los valencianos como si fueran de segunda: “No nos merecemos estar a la cola en inversiones”. En esta misma línea, ha preguntado a Mazón qué medidas se plantea para que seamos tratados como el resto de españoles: “Pues hacer lo contrario que hacía el Botànic”, le ha respondido de manera cómplice Mazón.