Los trabajadores del polígono de Carabona en Burriana denuncian un asentamiento ilegal en una nave

Los trabajadores del polígono industrial Carabona de Burriana denuncian la situación que se ha creado en una zona de naves que se ha convertido una especie de “alojamiento” para las personas que viven allí de forma permanente. El problema comenzó en agosto y lamentan la “situación de inseguridad” que se ha generado, además de las condiciones insalubres en las que estarían viviendo estas personas.

No es la primera vez que se da una situación similar. El año pasado la Policía Local de Burriana tuvo conocimiento de que en una zona próxima había camiones, caravanas y coches aparcados junto a una nave industrial. Al ir a comprobar la situación, estas personas mostraron un contrato de alquiler que les permitía aparcar ahí los vehículos y acceder a la luz y el agua.

Esto fue justo hace un año y en abril de 2021, cuando volvió la Policía, hablaron con los dueños de las naves porque se estaba incumpliendo parte del contrato ya que no podían estar viviendo ahí. Al terminar la temporada de la recogida de naranja se marcharon pero, parece ser que ahora han vuelto.

“Hemos llamado a la Policía pero no hacen nada. Sentimos una falta de seguridad enorme hasta el punto que da miedo salir solo de trabajar cuando es de noche porque cortan la luz, se ve que les molesta para dormir”, nos cuentan trabajadores de la zona.

Hay algunos, de hecho, que optan por teletrabajar por las tardes para evitar esa situación. Aunque no ha habido ningún enfrentamiento entre ellos, los trabajadores del polígono temen que la inseguridad aumente al llegar más personas que trabajan con la campaña de la naranja ya que viven hacinados y sin las condiciones pertinentes: “No es lógico estar trabajando con esta situación a unos metros, no se debería de permitir”.

Desde el Ayuntamiento de Burriana explican a elperiodic.com que la Policía Local va a vigilar la situación de la zona aunque a ellos no les consta que haya ningún asentamiento ilegal. En cualquier caso, explican que desde la administración poco pueden hacer cuando se trate de un contrato privado, más que aumentar la vigilancia en la zona.