Agustín Navalón: “El machismo es el enemigo en común”

Este miércoles el Naraniga ofreció su sala taronja para la presentación de Hombres para el siglo XXI: semblanzas de hombres feministas, una de las actividades de la programación de la campaña por el 25-N, día internacional contra la violencia de género. Un libro que recopila 19 historias de 19 hombres que expresan desde su punto de vista los efectos del machismo en nuestra sociedad.

Agustín Navalón Sánchez, profesor de secundaria, colaborador con la Fundación Isonomia y miembro de la asociación AHIGE (Asociación de Hombres por la Igualdad de Género), que ha publicado la obra, dirigió la presentación. Expresó que el machismo, además de afectar, indiscutiblemente, de forma directa a las mujeres, también tiene un impacto negativo en los hombres.

Navalón siente la necesidad de dirigirse hacia los hombres “porque las mujeres ya están haciendo su camino, muy interesante, mientras nosotros seguimos mirándonos el ombligo”. Por ello, cree necesario que los hombres se reúnan para hablar sobre feminismo.

El libro parte de la idea base feminista de que lo personal es político y que, por ello, la revolución interior pendiente de los hombres tiene y tendrá consecuencias políticas. Tiene como objetivo “remover las estructuras de poder que han mantenido durante siglos a los hombres en una posición de privilegio y a las mujeres en una posición subordinada”, recalca Navalón.

Para llevar a cabo esta revolución interior, según el miembro de la asociación, son necesarias tres etapas. La primera consiste en una toma de conciencia sobre “cómo hemos sido educados” y sobre cómo la masculinidad aprendida es tóxica. En segundo lugar, la segunda etapa se centra en pasar al malestar ético, es decir, no estar conforme con los roles asignados de género. Finalmente, la tercera etapa consiste en tomar partido hacia una “sociedad más libre, igualitaria y, en definitiva, más feminista”.

El conferenciante dejó claro que el machismo es tóxico tanto para las mujeres como para los hombres y por ello lo denominó como “el enemigo en común”. Además, es el caldo de la violencia de género, y por ello, Navalón no se explica por qué todos los spots publicitarios contra la violencia de género van dirigidos hacia la mujer, en lugar de ir dirigidas hacia los hombres: “¿por qué no dirigimos la publicidad hacia los hombres instándoles a que el machismo no es una opción?”, se plantea.

“Este se trata de un tema por el que deberían haber faltado sillas para los asistentes, pero, desgraciadamente, no ha sido así”, dice María Romero, concejala de Igualdad del Ayuntamiento de Burriana, lamentando el escaso nivel de asistencia.

Para concluir, Navalón anima a todos los hombres a que se reúnan para hablar sobre feminismo. Aclara que los hombres deben ser militantes activos en la “desactivación y deslegitimación de todo tipo de violencia contra las mujeres, contra todo tipo de prácticas que atenten contra la dignidad de las mujeres”, en lugar de realizar las heroicidades que han enseñado a realizar a los hombres desde siempre. “Para ello es necesario leer y escuchar a las mujeres”, finaliza.