Betxí presenta una moción contra la 'Ley de Libertad Educativa' por no garantizar un buen aprendizaje del valenciano
El grupo municipal Compromís pide su retirada y propone que sean los consejos escolares los que decidan
El Ayuntamiento de Betxí ha aprobado, en la última sesión plenaria del año, una moción para pedir la retirada de la denominada 'Ley de libertad educativa'. La propuesta, presentada por el grupo Compromís, obtuvo el apoyo de la mayor parte del consistorio con diez votos a favor (Compromís, PSOE, Unidas Podemos y el No Adscrito) y tres en contra (PP).
La regidora de Educación, Nuria Meneu, defendió la necesidad de retirar esta ley al considerar que "no garantiza que los alumnos que eligen la opción del castellano como lengua base acaben la educación obligatoria con un buen nivel oral y escrito del valenciano", la lengua propia e histórica de Betxí.
En este sentido, la moción plantea que sean los consejos escolares quienes decidan, según la realidad sociolingüística de cada centro, qué lenguas deben de priorizarse en las diferentes etapas educativas.
Las Cortes Valencianas aprobaron el pasado mas de junio la nueva 'Ley de libertad educativa', impulsada por los grupos parlamentarios PP y VOX, con la novedad de que ahora sean las familias las que puedan elegir la lengua base -valenciano o castellano- con las que desean que sus hijos e hijas realicen la Educación Infantil, Primaria, Secundaria Obligatoria y Bachillerato. Una propuesta que, como advierte Compromís, "rompe el principio de inclusión educativa, puesto que no se tiene en cuenta la necesidad de cohesión de los grupos", y "tampoco se garantiza un aprendizaje competente del valenciano".
Tal como explicó Meneu, "si bien el alumnado que prioriza el valenciano domina perfectamente el castellano al finalizar sus estudios, no ocurre lo mismo a la inversa". Y, este hecho, "podría generar muchos problemas en el funcionamiento del centro, además de guetos en función de la lengua base elegida".
Por estos motivos, el Ayuntamiento de Betxí insiste en la necesidad de preservar el valenciano como parte esencial "de nuestro patrimonio cultural y lingüístico", y retirar en consecuencia la nueva ley educativa.
