La Diputació de València pondrá en servicio en septiembre la Variante Norte de Bétera que desviará el tráfico del municipio
El área provincial de Infraestructuras ha invertido más de 15 millones de euros en un trazado de cinco kilómetros que permitirá desviar el paso de 12.000 vehículos diarios por el núcleo urbano
El presidente Gaspar y el responsable provincial de Carreteras, Rafa García, visitan la obra y anuncian la puesta en marcha de la segunda fase, con una inversión de 3,6 millones para la conexión con la CV-333
La corporación adelanta el fin de la obra previsto para diciembre e inicia la pavimentación y colocación de sistemas de contención y señalización, además del ajardinamiento
La Diputació de València terminará las obras de la Variante Norte de Bétera en septiembre, adelantando así la fecha de finalización prevista para final de año. El nuevo trazado de cerca de cinco kilómetros de longitud evitará el colapso de tráfico que sufren a diario los vecinos del municipio y usuarios de la CV-310 y generará nuevos itinerarios peatonales y ciclistas.
El proyecto del área de Infraestructuras que dirige Rafa García, con una inversión que supera los 15 millones de euros, entra en la última fase de ejecución, que contempla la pavimentación de la vía de aglomerado asfáltico y la colocación de la señalización horizontal y vertical y los sistemas de contención. El responsable provincial de Carreteras destaca “el cumplimiento, con adelanto incluido, de los plazos de realización de una obra ampliamente reivindicada por los usuarios de una vía muy transitada que evitará incomodidades y sobre todo reforzará la seguridad en el núcleo urbano de Bétera, desviando el paso de 12.000 vehículos diarios”.
El propio Rafa García explica que la actuación en la CV-310, que conectará dos puntos de la carretera sin necesidad de atravesar las calles de Bétera, “contempla también la restauración paisajística del entorno, con el ajardinamiento de los taludes, márgenes y glorietas y la plantación de arbustos autóctonos de la zona mediterránea”.
Segunda fase para enero de 2022
El diputado de Carreteras ha acompañado al presidente de la Diputación, Toni Gaspar, en su visita a las obras de la Variante de Bétera, en la que también han participado alcaldes y alcaldesas de la comarca del Camp de Túria. Tras la explicación de esta primera parte de la actuación a cargo de los técnicos, los responsables provinciales han anunciado la puesta en marcha en enero de 2022 de la segunda fase del proyecto, que contará con una inversión de 3.640.000 euros y tendrá un plazo de ejecución de seis meses.
El titular de Carreteras, Rafa García, ha avanzado que el trazado de la segunda fase de la Variante de Bétera tiene una longitud aproximada de 950 metros, desde la cuarta glorieta ejecutada en la primera fase de la obra hasta la existente en la CV-333 en la carretera que conduce a Olocau. El objetivo de esta segunda fase es “ampliar la intersección giratoria para establecer todas las conexiones necesarias entre la nueva variante y la CV-333, incluido el acceso a la urbanización La Masía”, ha detallado García.
Por su parte, el presidente Gaspar ha manifestado que estas actuaciones en la red provincial de carreteras “demuestran que la prioridad de la Diputación es reforzar la seguridad de las vías y mejorar la calidad de vida de las vecinas y vecinos de nuestros municipios”. El máximo responsable provincial ha destacado la Variante de Bétera como “el proyecto más ambicioso en materia de Infraestructuras de las dos últimas legislaturas”, al tiempo que ha señalado que con esta actuación “se evidencia la voluntad de esta institución por resolver los problemas que reivindican los municipios y hacerlo con la necesaria colaboración de otras administraciones”.
La primera fase, a punto
La pavimentación y el ajardinamiento del nuevo trazado de 4,7 kilómetros, que discurre por el margen nordeste del núcleo urbano de Bétera, se inicia una vez completada la fase de movimiento de tierras y el acondicionamiento de la explanada, así como la construcción de cuatro puentes y tres pasos inferiores necesarios para salvar la línea férrea y los barrancos del Carraixet y Portaceli, así como conectar los caminos y vías existentes en el trazado.
La obra, adjudicada a la empresa Bertolín, incluye la construcción de cuatro glorietas que, junto a las vías de servicio laterales, proporcionarán el control total de los accesos a la carretera. La calzada tendrá un ancho de 12 metros, con dos carriles por sentido de tres metros cada uno y arcenes-bici de dos metros a ambos lados. También se habilitará una vía ciclopeatonal segregada y protegida de 2,5 metros de amplitud en el margen izquierdo.
En palabras de Rafa García, “esta es una obra que han demandado los gobiernos de distinto signo político que ha tenido Bétera y que resuelve un problema importante de seguridad y de molestias al vecindario”. Además, “la conexión de la carretera que viene de València con la CV-310 en dirección Náquera y Serra evita el paso por la travesía de Bétera facilitando el acceso al municipio y a los polígonos industriales de L’Horta Vella y El Pla”, ha añadido el titular provincial de Infraestructuras.
