Las farolas deterioradas por el orín de perro incorporan un novedoso sistema de protección

Almussafes ha iniciado un proyecto para mejorar el mantenimiento de las luminarias situadas en las distintas calles del municipio. En esta primera fase de la iniciativa, el consistorio ha invertido 6.000 euros en la colocación de un sistema que soluciona los problemas de corrosión de las bases de las farolas producidos por la orina de los perros y la humedad. Esta innovadora iniciativa, que de momento ya se ha aplicado en 29 farolas, utiliza resina de dos componentes y se adapta a cada una de las farolas objeto de la intervención, dado que el material se inyecta in situ a través de unos moldes.

Con el paso del tiempo, la orina de los perros y la humedad van deteriorando la luminaria urbana de las ciudades provocando una corrosión prematura del galvanizado, una situación que además de repercutir negativamente en la estética del espacio público, produce serios problemas de salubridad y seguridad. Almussafes no es ajeno a este problema, por lo que desde el ejecutivo local han decidido iniciar un proyecto para facilitar el mantenimiento de las farolas situadas en el núcleo urbano.

El consistorio municipal ha invertido un total de 6.000 euros en la instalación de un sistema que protege de los rayos ultravioletas y de otros factores que aceleran el deterioro del mobiliario urbano. En esta primera fase se está interviniendo en 29 farolas, ocho situadas en el parque Central y las 21 restantes en las calles Benifaió, Nou d'Octubre y algunas vías adyacentes. Este innovador sistema, para cuya instalación se ha confiado en la empresa Ultraprotek de Vila-Real, utiliza resina de dos componentes y se adapta a las dimensiones de cada farola, además de permitir la personalización de la superficie con escudos, logotipos y textos. Su composición a base de resinas garantiza una mayor adherencia a todos los materiales y una mejor adaptación a los elementos a proteger. Asimismo, la ausencia de porosidad, una vez polimerizada, evita filtraciones y proporciona una elevada protección ante la corrosión.

"Hemos empezado por las zonas más deterioradas de la población, pero nuestra intención es avanzar poco a poco para cubrir todas las luminarias del término municipal que necesiten mantenimiento en este sentido", explica la concejala de Medio Ambiente, Teresa Iborra. "Esto es un trabajo en equipo. Desde el gobierno local nos comprometemos a mejorar las condiciones del espacio público, pero en este cometido necesitamos la complicidad de la ciudadanía, y eso pasa por seguir concienciándonos todos sobre la importancia de controlar que nuestras mascotas orinen en las zonas habilitadas para ello, que son los espacios de esparcimiento de animales", recuerda. Almussafes cuenta con un total de seis recintos de estas características en el término municipal.

Instalación

El proceso de instalación consta de distintas fases. Primero se limpia la suciedad y la pintura restante con disolvente, posteriormente se aplica una imprimación para que se absorba correctamente el material aplicado y una vez seca la zona se preparan los moldes, que se diseñan de manera personalizada para cada farola. Finalmente se inyecta el producto y cuando se seca se pinta. En este caso, se ha optado por incorporar en las farolas el escudo del Ayuntamiento de la localidad.

"Esta oxidación, y más debido a la orina de los perros, supone un enorme riesgo para los vecinos y vecinas a nivel de salubridad, pero también de seguridad, ya que la situación puede llegar a desembocar incluso en una caída de las farolas", resalta Iborra. "Seguiremos trabajando en el mantenimiento de los espacios públicos para garantizar que se cumplen ambos parámetros", concluye la edil.