El ITC ampliará su actividad en un 30% con el nuevo edificio de Almassora
El Instituto de Tecnología Cerámica (ITC) de la Universitat Jaume I (UJI) incrementará sus instalaciones con el edificio Almassora a partir de septiembre, donde prevé ampliar el 30% de la actividad, que ha crecido en los últimos años y que actualmente se desarrolla en la sede de la UJI. Así lo han ratificado esta mañana el presidente de la Asociación de Investigación de las Industrias Cerámicas (AICE), José Castellano, y el director gerente del ITC, Gustavo Mallol, a la alcaldesa de Almassora, Merche Galí, y la primera teniente de alcaldesa, Susanna Nicolau, en la reunión celebrada en el consistorio.
Castellano y Mallol han comunicado a las representantes su intención de consolidar la actividad en la localidad, centrada en la industria 4.0, por lo que no descartan ampliar el bloque en el futuro. "La posibilidad de realizar parte de la actividad del centro en Almassora es muy positiva, ya que supone una garantía para consolidar el instituto y garantizar trabajo de calidad en Almassora", ha señalado Galí.
De momento, han incidido los responsables del ITC, realizarán algunas mejoras en el interior para adecuar el centro a los nuevos usos. Se trata de pequeñas intervenciones para facilitar la actividad diaria vinculada a la industria inteligente. No en vano, alrededor de 25 trabajadores estrenarán el Instituto Tecnológico al finalizar el verano y la intención es que todas las dependencias tengan uso.
Tras la visita del President de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, al centro en febrero y la reunión de la Mesa de la Cerámica, los trámites se han sucedido para acelerar el traslado de la actividad. En la actualidad, el ITC ya cuenta con el visto bueno del consejo rector de AICE para asumir la cesión de la titularidad del bloque y la mudanza durante el verano permitirá estrenar el edificio costeado con fondos autonómicos por valor de 2,4 millones de euros durante el gobierno de Alberto Fabra y que ha permanecido abandonado durante en este tiempo.
"La falta de proyecto y planificación llega ahora a su fin y lo hace poniendo en valor la industria de la cerámica en nuestros polígonos", ha incidido Nicolau. No en vano, su ubicación en el SUPOI-8 se enmarca en el epicentro de la cerámica local, que crece exponencialmente a juzgar por las licencias solicitadas y los trabajos que se suceden en el entorno para el desarrollo de la zona.
Para Almassora, la apertura del ITC en el polígono confirma su proyección industrial cerámica, que en la última edición de la feria Cevisama incrementó su presencia en un 46%, además de registrar un 18,1% más de licencias de obra en 2017 que el año anterior. Por este motivo, ambas partes trabajarán para que la titularidad del uso se mantenga durante los más de 10 años acordados.
