La UA lidera un taller de trabajo internacional sobre “Áreas rurales frente al cambio climático” en la Isla de Tabarca
60 estudiantes de las escuelas de arquitectura de Karlsruher (Alemania), La Réunion (Francia), Louvain (Bélgica) Oslo (Noruega) y de la Universidad de Alicante desarrollan propuestas sobre el futuro sostenible de la isla
Estudiantes y egresados de la UA han creado una audioguía inmersiva sobre las infraestructuras que sostienen Tabarca
Javier Sánchez Merina y Joaquín Alvado Bañón, profesores de Proyectos Arquitectónicos del Departamento de Expresión Gráfica, Composición y Proyectos de la Universidad de Alicante (UA), lideran un taller de trabajo sobre “Áreas rurales frente al cambio climático” en la isla de Tabarca, que se está llevando a cabo desde el pasado 4 de abril y que finaliza esta tarde, a las 19 horas, con un acto de presentación de proyectos en el Centro Cultural Las Cigarreras de Alicante (entrada libre).
Este encuentro internacional está financiado con una beca Erasmus BIP (Blended Intensive Programme) y en él participan 60 estudiantes y profesorado internacional procedente de las escuelas de arquitectura de Karlsruher (Alemania), La ReÌunion (Francia), Louvain (Bélgica) y Oslo (Noruega), junto a estudiantes, egresados y profesorado de la UA.
El encuentro dio comienzo el pasado jueves 4 en el Museo de la Universidad de Alicante (MUA), con una serie de conferencias introductorias impartidas los profesores Miguel Mesa, Juan Carlos Castro y Arturo Calero, quienes mostraron el trabajo que está desarrollando el alumnado de Arquitectura de la UA sobre soluciones arquitectónicas para combatir el calentamiento global: Arquitectura para la parte acuática del mundo; exhibición de Proyectos Zero “Reflexionar con los agentes del activismo climático sobre otras arquitecturas posibles; una investigación sobre la obsolescencia de la arquitectura; o la presentación de los Resultados del KIT - cartografía a distancia.
Finalizadas las sesiones introductorias, el grupo de trabajo se ha desplazado a la Isla de Tabarca donde está desarrollando trabajo de campo que finalizada hoy miércoles 10 de abril.
El profesor Sánchez Merina explica que se han organizado cuatro grupos de trabajo para realizar propuestas sobre el futuro sostenible de la isla de Tabarca. Estos grupos mezclan a los estudiantes de las distintas escuelas y cada grupo está dirigido por profesores de una escuela determinada, “con el fin de mostrar los distintos acercamientos a una misma problemática”, tal y como detalla Sánchez Merina, quien añade que “los profesores de la escuela alemana están interesados en mostrar ecosistemas que ya no existen, visibilizando sutiles transformaciones sufridas en los últimos años. Por otro lado, los belgas y franceses realizan dibujos muy precisos de los límites entre lo humano y no humano, estableciendo nuevas conversaciones y oportunidades de futuro. En cuanto al grupo noruego, ha trabajado con narrativas ilustradas por múltiples animaciones entre lo líquido y sólido”.
Por último, el grupo alicantino ha contado con la importante colaboración del colectivo “La cuarta piel”, integrado por egresados de la UA, quienes han desarrollado junto a los estudiantes una audioguía inmersiva sobre la isla. Frente a las audioguías convencionales centradas en los hitos turísticos, explica Sánchez Merina, “esta audioguía muestra las infraestructuras que sostienen Tabarca: el puerto donde cargan la basura diaria o suministran los bienes de consumo, el depósito de agua dulce o la depuradora junto al acceso a la cantera, son algunas de las paradas de esta experiencia que ofrece una mirada alternativa de la isla”.
Los integrantes de La cuarta piel afirman que “si bien Tabarca ha aspirado en diferentes momentos de su historia a la autosuficiencia, hoy hablamos de un lugar profundamente dependiente de un mundo exterior que le proporciona servicios, gestiona sus residuos y envía a sus turistas. Es necesario visibilizar esta situación y que socialmente tomemos conciencia de esta dependencia para afrontar colectivamente los retos ecológicos que se nos plantean actualmente. La dependencia, inevitable y común en todos nuestros contextos urbanos, pero especialmente evidente en Tabarca, ha movilizado múltiples tecnologías como depuradoras, infraestructuras de canalización, sistemas de riego o transportes marítimos que son muchas veces desatendidos y merecen hoy, más que nunca, la reflexión y participación activa de la sociedad en su conjunto. En estas infraestructuras se gestionan los recursos de los que dependen las ciudades y que sostienen nuestro día a día. Es necesario visibilizarlas y comprender sus implicaciones para afrontar colectivamente los retos ecológicos que se nos plantean actualmente”.
Tabarca ya cuenta con una audioguía centrada en sus relaciones ecosistémicas, cuya intención última es remar a favor del apego y del cuidado de los entornos que habitamos. El recorrido incluye instalaciones de agua en la isla que han sido construidas con el patrocinio de la empresa Rain-Bird, fabricante de productos y servicios de riego. Y además ha contado con la presencia de profesoras colaboradoras de las universidades de Umeå (Suecia) y Nicosia (Chipre).
¿Qué son los Erasmus BIPS (Blended Intensive Programmes)?
Son programas breves e intensivos, que utilizan formas innovadoras de aprender y enseñar, incluyendo el trabajo colaborativo online. Tienen como objetivo llegar a estudiantes de cualquier campo de estudio y ciclo, y ofrecen una oportunidad de movilidad internacional más corta a estudiantes que por cualquier circunstancia no pueden o no desean realizar una movilidad de larga duración.
Los programas Erasmus BIP incluyen aprendizaje basado en desafíos donde equipos transnacionales de estudiantes trabajan juntos para abordar retos o proyectos. A menudo, los grupos de trabajo combinan estudiantes de diferentes áreas de estudio para abordar el proyecto desde perspectivas diferentes y que tendrán que aprender a colaborar y complementarse. Con el apoyo de profesores de las universidades participantes, los grupos de estudiantes trabajarán en equipo de forma colaborativa, combinando un período de trabajo online y un periodo de trabajo presencial en el que todos los estudiantes se trasladarán al país de la universidad organizadora para una movilidad corta, normalmente de una semana. En la mayoría de casos, primero se trabaja y aprende online, y la estancia física de una semana es el broche o cierre del proyecto. En algunos casos, la actividad online puede continuar después de la semana de trabajo presencial.