Los Guardias Civiles exigen que las pruebas del COVID-19 a los presos se realicen dentro de la cárcel de Alicante II
Quieren evitar el riesgo de contagio durante los traslados de los internos a los centros sanitarios, además de minimizar las fugas
La Asociación Unificada de Guardias Civiles exige al director del Centro Penitenciario Alicante II, ubicado en Villena, que realice las pruebas para detectar el COVID-19 a los presos.
No solo eso, sino que la petición es que estas pruebas se lleven a cabo dentro de la propia cárcel para minimizar los riesgos tanto para los reclusos como para los propios Guardias Civiles.
Los traslados que se realizan de los presos a los centros hospitalarios son “innecesarios y podrían estar originando riesgos para la salud y seguridad de manera evitable, ya que sus patologías podrían ser atendidas por el servicio sanitario de la propia prisión”, afirman los Guardias Civiles.
Además de las pruebas relacionadas con la detección del Coronavirus, los agentes también indican que “en otros casos, dichos traslados tienen como fin la realización de trámites irrelevantes, como ser informados sobre resultados de pruebas médicas, e incluso en horario nocturno para asistencias que, a juicio de la Asociación, no revisten de urgencia”.
Brotes en cárceles
Sin ir más lejos, fue el pasado jueves cuando se detectó un macrobrote de Coronavirus en la cárcel de Picassent. Ha afectado a un total de 52 personas, tal y como ha denunciado el sindicato CSIF, que lamenta que se ha expandido en pocas horas tras el regreso de permiso de un interno.
Los contagios se extendieron entre los módulos 14 y 16 de la cárcel, lo que provocó una alarma sanitaria y la reacción de los responsables para evitar estas circunstancias.
Riesgo de fuga
Además, al grave riesgo de contagio del virus en estas salidas, “debe sumarse el riesgo de fuga que implica cualquier conducción o traslado de un interno”, explican los Guardias Civiles.
De hecho, la propia Secretaría General de Instituciones Penitenciarias ha hecho público recientemente que ha remitido un escrito a todos los centros penitenciarios comunicándoles que se ha decidido suspender todas las conducciones de internos, salvo aquellas que sean estrictamente necesarias.
Respondiendo a estos argumentos, la Asociación de Guardias Civiles ha solicitado al director del Centro Penitenciario Alicante II que “dicte las instrucciones oportunas para que se eviten los traslados de internos que no sean estrictamente necesarios en este momento tan excepcional, y que se habiliten los medios precisos para realizar pruebas de detección del COVID-19 en el propio centro penitenciario, minimizando así los riesgos para la salud, tanto de los internos como para los Guardias Civiles”.