El Ayuntamiento de Alicante insta a la Conselleria de Educación que acabe con la 'precariedad' en la enseñanza obligatoria
El Ayuntamiento de Alicante ha aprobado en pleno una declaración institucional, a instancia de los grupos Populares y Ciudadanos, en la que insta a la Conselleria de Educación, Cultura y Deporte a que cumpla con sus obligaciones y acabe con los numerosos incumplimientos que mantienen en precario la enseñanza obligatoria, empezando por la educación digital en tiempos de COVID, la no prestación de servicios esenciales como los de psicopedagogía, el ralentización en la retirada del fibrocemento y la construcción de centros, la imposición lingüística o el retraso en el pago de becas comedor, de transportes o el bono libro.
La iniciativa ha salido adelante con los 16 votos del PP (9), Ciudadanos (5) y VOX (2), votando en contra de la propuesta los 13 ediles del PSOE (9), Unidas Podemos (2) y Compromís (2).
La concejal de Educación, Julia Llopis, ha señalado que "Marzà se va a convertir en el peor conseller de Educación con su sectarismo lingüístico, agrandando la brecha digital y sin poner en marcha el sistema digital online en un año de pandemia, eliminar el servicio psicopedagógico solicitado por todos, ni la eliminación del fibrocemento que solo se ha retirado en tres centros en seis años, la falta de pago de las becas comedor, entre otras muchas carencias, por lo que ha pedido al conseller que si no se siente capacitado que dimita".
En la declaración se resalta que “llevamos un año de pandemia, un año que ha tenido unas consecuencias devastadoras en todos los ámbitos de nuestras vidas, por ello, y ante situaciones de este calado, los responsables públicos debemos estar al pie del cañón, trabajando sin descanso por y para la ciudadanía”, al tiempo que resaltan los incumplimientos del conseller Vicent Marzà.
El texto plantea cuestiones como la brecha digital. “Se ha constatado una carencia de medios, como es el caso de las tablets que la Conselleria de Educación anunciaba en abril del año pasado, para paliar las dificultades a las que se enfrentaba el alumnado que no dispusiera de medios para seguir el aprendizaje a distancia durante el confinamiento, pese a que en el primer confinamiento quedaron claramente identificados aquellos alumnos que carecían de los medios necesarios”.
También se resalta la inexistencia del sistema educativo online para alumnos Covid, para alumnos de Secundaria que solo han podido asistir a clase en días alternos o para aquellos que han tenido que autoconfinarse por alguna patología grave.
“En estos casos, no se ha puesto en marcha el sistema educativo online, hecho que ha redundado en un avance más lento en el aprendizaje y una gran cantidad de temario por dar, puesto que queda pendiente de recuperar temario del trimestre anterior, dado que el alumnado únicamente ha podido continuar haciendo deberes desde casa” señala el documento.
Otro de los asuntos que cuestionan la iniciativa del equipo de gobierno respaldada por el pleno es la imposición de los Proyectos Lingüísticos de Centro (PLC) y la limitación de la participación por la Covid. “Consideramos que no es el momento idóneo para la imposición de estos planes lingüísticos, que en las circunstancias actuales, resultan contraproducentes desde un punto de vista académico y abocan al fracaso escolar del alumnado, que probablemente tendrá que cursar asignaturas troncales en una lengua que no es su lengua materna, como el valenciano o el inglés”, asegura la declaración institucional que solicita la paralización de los planes lingüísticos para el próximo curso escolar 2021-2022.
Asimismo se señala que “en un momento en el que los servicios psicopedagógicos escolares son esenciales, la Conselleria ha decidido derogarlos, y ha elaborado un nuevo decreto de orientación educativa en el que incluye unos nuevos equipos de orientación que serán los que asuman la actual tarea llevada a cabo por los SPE. Por este motivo, y puesto que en momentos como el actual, en que se hace más necesaria que nunca la atención al alumnado por parte de estos profesionales, consideramos que no es prudente realizar este tipo de cambios máxime cuando los nuevos orientadores no conocerán el centro o el alumnado y precisarán de un proceso de adaptación a los mismos”.
Por lo que respecta a la retirada del fibrocemento en los distintos centros educativos de la ciudad, hasta la fecha, únicamente se ha retirado en tres centros quedando pendiente la retirada de siete más: CEIP El Tossal, CEIP Rabassa, CEIP San Nicolás de Bari, CEIP San Fernando, CEIP Azorín, CEIP Emilio Varela y el IES Antonio José Cavanilles.
La reducción del presupuesto del Plan Edificant para atender otros gastos derivados de la pandemia como por ejemplo la renta valenciana de inclusión, es otra de las preocupaciones del gobierno municipal de Alicante. Al igual que el escaso alcance del Programa Proa+ y de las clases de refuerzo que en la Comunitat solo se han previsto para los alumnos de 1º y 2º de la ESO. “Es además una norma que excluye de forma intencionada a los alumnos con necesidades educativas de los centros concertados, como si estos no formaran parte del sistema educativo valenciano”, pone de relieve la declaración institucional.
Finalmente, se denuncia la falta de pago de las becas comedor, becas de transporte y el bono infantil con las consecuencias que este incumplimiento acarrea, máxime en una situación como la actual, marcada por la acentuada crisis social que se ha derivado como consecuencia de la pandemia.