Alicante moviliza a dos bomberos con guías caninos y material de rescate para auxiliar a las víctimas del terremoto en Turquía
Rafael Arnau y Ángel Moratalla se incorporan con perros adiestrados al dispositivo de búsqueda y rescate organizado por el Grupo de Voluntariado GEA con una docena de agentes
El Ayuntamiento de Alicante participa activamente en un operativo de auxilio a las víctimas del devastador terremoto de Turquía y Siria y ha movilizado este miércoles a dos bomberos del Servicio municipal de Prevención, Extinción y Salvamento (SPEIS), Rafael Arnau y Ángel Moratalla, que han emprendido viaje a Turquía junto con la unidad canina para dar apoyo en las labores de rescate de personas y en el dispositivo internacional de búsqueda de supervivientes en esta catástrofe.
El alcalde, Luis Barcala, ha autorizado por la vía de urgencia esta salida de los bomberos para desplazar hasta el lugar del siniestro un operativo de Alicante, y poder así atender la petición internacional ante la grave situación de emergencia humanitaria y profesional, ya que los primeros días son el período más crítico de supervivencia y es necesario actuar con "máxima rapidez y eficacia". Al mismo tiempo, el primer edil ha enviado una carta a la Subdelegada del Gobierno en Alicante, Araceli Poblador, en la que pone a disposición del Ejecutivo central "todos los medios humanos y materiales" de que dispone el Ayuntamiento, "así como los equipos de intervención de los Cuerpos de Seguridad de la institución para colaborar coordinadamente en paliar la grave situación de ayuda humanitaria que ha generado el seísmo".
Los bomberos del SPEIS viajan al lugar de la tragedia con dos guías caninos con los perros, y llevan consigo material de rescate, explosímetro, herramientas hidráulicas de excarcelación, un generador y los equipamientos personales de intervención de los efectivos del SPEIS.
Los bomberos se han desplazado con un furgón de transporte de material del Ayuntamiento hasta Madrid, donde tomarán un avión hasta Estambul, y allí se van a coordinar con el Gobierno turco, los equipos internacionales y la ONU. Este operativo está organizado por el Grupo de Voluntariado GEA de Búsqueda y Rescate y en total viajan 12 bomberos y sanitarios.
El alcalde de Alicante ha puesto a disposición del Gobierno "todos los medios humanos y materiales", así como los equipos de intervención de los cuerpos de Seguridad del Ayuntamiento "para que desde Alicante se pueda dar soporte y ayuda a todas las personas afectadas por esta catástrofe", según refleja la carta remitida a la subdelegada del Ejecutivo central.
Operativo de rescate en las estructuras colapsadas
Este operativo de 12 efectivos de Bomberos y sanitarios forman parte del Grupo Gea que ya han participado en otros dispositivos internacionales de búsquedas de personas en terremotos y catástrofes, como las ocurridas en Nepal, Haití o Italia. Tienen amplia experiencia y viajan con los perros de la unidad canina del SPEIS adiestrados para encontrar personas.
El contingente desplazado desde Alicante será recibido por funcionarios del Gobierno turco, que les asignarán una zona de trabajo de estructuras colapsadas, en la hay huecos de vida y personas supervivientes.
Grupo especializado en el SPEIS
Alicante es uno de los pocos cuerpos de bomberos de España que cuenta con un equipo especializado en Búsqueda y Rescate en Estructuras Colapsadas -BREC-, con capacidad de respuesta y coordinación ante una situación de emergencia en nuestra ciudad ya sea por un terremoto, un derrumbe de una vivienda por obras, explosión de gas o mal estado de la estructura.
También cuenta con perros de la Unidad Canina que participan en las tareas de rastreo, búsqueda y salvamento de las víctimas ya que están adiestrados para ello. Los Bomberos utilizan las diferentes herramientas como la cámara de búsqueda y localización con comunicación para visualizar y comunicarse con las víctimas en espacios confinados inaccesibles, cerrados o bajo escombros, que permite evaluar el nivel de asistencia y salvamento necesarios.
El SPEIS dispone, asimismo, de una zona base de seis mil metros creada en una parcela anexa al parque de bomberos que ha sido cedida para trabajar y realizar maniobras y simulacros de búsqueda y rescate en estructuras colapsadas y derrumbes, en la que también entrenan a los perros de rescate de bomberos.