El Ayuntamiento de Algemesí firma un convenio con Copal y Machí para canalizar ayudas al cuidado de frutales jóvenes
Algemesí invita a los agricultores a “subirse al carro” de la renovación varietal
El Ayuntamiento de Algemesí ha firmado un convenio con la Copal y con la empresa de Tratamientos Agrícolas Joaquín Machí para canalizar ayudas a los profesionales del campo de 100 euros por hanegada para el cuidado de árboles frutales jóvenes. Toni García, concejal de Agricultura, ha cerrado el acto con una invitación: “Necesitamos que los agricultores se suban al carro de la renovación varietal”.
Podrán optar a las ayudas todos los agricultores que renueven las plantaciones o que pongan en producción campos abandonados o con un arbolado caduco en todo el término municipal o que lo hayan hecho desde enero de 2020, con un mínimo de 30 nuevas plantas por hanegada. La previsión de gasto municipal es de 60.000 euros para este año, sube a 100.000 en 2021 y se mantendrá “a largo de los próximos tres años”, según ha explicado García. El responsable de Agricultura ha celebrado el decidido apoyo de Copal y de la firma Machí a la iniciativa municipal como entidades colaboradoras para gestionar la distribución de las ayudas a los agricultores interesados. “No les solucionamos la vida, pero es un estímulo desde el Ayuntamiento para salvar el mal momento que pasa el agricultor”, ha sentenciado García.
Vicente Bomboí, presidente de Copal, ha recordado que “entre el 80 y el 90% de las explotaciones agrícolas de Algemesí son viejas y no ofrecen ni productividad ni rentabilidad”. Bomboí ha señalado que el convenio con el Ayuntamiento “es el principio de un futuro próximo en que tendremos variedades con buena salida al mercado y que sean más rentables”.
Carlos Machí, de la empresa Joaquín Machí Ferris, ha apuntado que el convenio es “un pequeño empujón para la gente del campo que todavía tiene ganas y se interesa por hacer cosas nuevas”.
La alcaldesa Marta Trenzano ha recordado que su equipo siempre ha apostado “por dedicar el dinero público a cambiar las cosas a mejor”. “Reducir un año los impuestos a las fincas rústicas no sirve de nada, es mejor tener dinero para invertir y ayudar al campo”, ha explicado Trenzano, “que cada uno haga un análisis para ver que variedades tienen más demanda y luego, que elija la que quiera, se trata de que el campo sea rentable y que el labrador vea recompensados su esfuerzo y su dedicación”.
El convenio ha sido acordado en el seno del Consell Local Agrari y se asume como una iniciativa a medio y largo plazo. Las ayudas municipales para el cuidado de plantas jóvenes son compatibles con otras subvenciones europeas o nacionales.
Los agricultores interesados deberán indicar el número de hanegadas cubiertas de nuevos plantones que exigen cuidados específicos a través de una declaración responsable. Los técnicos municipales se garantizan la supervisión de los campos en plazos de tres y cinco años para comprobar que efectivamente se están cultivando árboles jóvenes y se hace buen uso del dinero.