Comienzan las obras para dotar de un ascensor de ocho plazas al Conservatorio de Música y Danza Juan Cantó de Alcoy

La empresa Cantó Obras SLU ha empezado esta semana las obras de instalación de un ascensor de ocho plazas en el Conservatorio Municipal de Música y Danza “Juan Cantó” de Alcoy. El contrato fue adjudicado en febrero por más de 82.000 euros a esta mercantil, que cuenta con un plazo de dos meses para ejecutar el proyecto.   

El concejal de Educación, Alberto Belda, ha recordado que “esta intervención era muy necesaria y demandada para dotar de accesibilidad a un edificio que, debido a sus especiales características arquitectónicas y patrimoniales, ha requerido de un proyecto especialmente preciso y cuidadoso”.

Belda ha añadido que, además de garantizar la accesibilidad y poner en valor el patrimonio, el Ayuntamiento de Alcoy cumple con esta obra  con los requisitos establecidos por el anterior gobierno de la Generalitat Valenciana para poder ceder el inmueble a la conselleria y que fuera esta quien se ocupara íntegramente de su gestión. “Actualmente, el consistorio está asumiendo unas competencias que no le corresponden para garantizar un servicio tanto a Alcoy como a las poblaciones de estas comarcas. Se trata de un gasto de más de un millón de euros al año en personal y mantenimiento que repercuten directamente sobre las arcas municipales”.

El edil lamentó el cambio de postura del actual gobierno de la Generalitat, que descartó, por el momento, hacerse cargo de la gestión. “Confiamos en que la conselleria de Educación lo reconsidere y tenga en consideración sus obligaciones y el esfuerzo que está realizando este Ayuntamiento”.

Ha añadido que las obras han empezado justo esta semana para evitar el máximo de molestias al cuerpo docente y al alumnado del centro, con el objetivo de que el ascensor esté instalado para el inicio del próximo curso. En estos momentos, la empresa está señalizando la zona de obra y haciendo acopio de materiales y se espera que en los próximos días llegue el conjunto de la maquinaria. 

El proyecto elaborado para llevar a cabo esta intervención ha tenido en cuenta las diferentes opciones para evitar afectaciones al patrimonio y atender, al mismo tiempo, las necesidades de utilización y accesibilidad.

Así, la opción considerada como más viable sitúa la instalación entre la caja de escalera y la fachada sur, recayente al patio lateral. Según los pliegos, respeta la distribución existente y los elementos de mayor valor del inmueble, al tiempo que mantendrá y utilizará materiales existentes, cuidando los diferentes elementos, revestimientos y pinturas, cerrajerías y carpinterías y los pavimentos existentes.

La solución afecta mínimamente a la distribución de las aulas ni de los recorridos de distribución existentes, tampoco a los huecos de fachada, ni a la iluminación natural del edificio.

En lo que respecta a la afectación patrimonial al edificio, según el informe elaborado será mínima, puesto que no será necesario actuar sobre la cubierta y toda la intervención quedará en el interior del edificio.

Se considera, por último, que es la opción que mejor resuelve la accesibilidad, que mejor armoniza con el conjunto del edificio y que salvaguarda el valor patrimonial de la escalera, puesto que se integra perfectamente, sin afectar ni al exterior del edificio o su cubierta, ni tampoco a la caja de escalera o a las vías de comunicación existentes.