Xirivella reactiva la programación cultural tras el confinamiento
Los patios de los colegios públicos acogerán durante julio un dueto de monólogos humorísticos, una actuación circense, un musical infantil y proyecciones cinematográficas
Xirivella se reencontrará con los actos culturales masivos en un par de semanas. El Ayuntamiento ha programado en los patios de los colegios públicos un evento para cada viernes del mes de julio. Se han elegido los centros docentes por su amplitud y por la facilidad que ofrecen para controlar la afluencia y el aforo. “Hay que aprender a convivir con el virus y recuperar paulatinamente los espacios escénicos”, afirma el alcalde Michel Montaner. “Esa necesidad es particularmente intensa en Xirivella, sede de la Mostra Internacional de Pallases i Pallassos y localidad acostumbrada al humor y la representación; pero ese reencuentro con nuestra cotidianeidad debe ser compatible con el respeto de las normas, respetando la excepcional normalidad que nos tocará vivir durante un tiempo”, apostilla el primer edil.
El aforo se va a limitar a 200 personas en todos los actos, con un máximo de 2 invitaciones por solicitante que se podrán obtener en www.giglon.com a partir del lunes, 22 de junio. El Ayuntamiento enfatiza que solo accederán al recinto las personas con ticket y pide que se eviten aglomeraciones innecesarias en la puerta de acceso. Se dispensará gel hidroalcohólico al entrar, la mascarilla será obligatoria dentro del recinto, las sillas estarán separadas entre sí por un metro y medio de distancia y el público deberá permanecer sentado mientras dure el espectáculo.
El primer evento, que tendrá lugar el viernes 3 de julio en el patio del CEIP Ramón y Cajal, será un monólogo a dúo de los humoristas Eugeni Alemany i Miki Dkai. Le seguirán, en los sucesivos viernes del mes y en diferentes colegios, la proyección del largometraje ‘Canta’, la actuación circense ‘Save the Temazo’, el musical infantil ‘La rosa encantada’ y la proyección de ‘El mejor verano de mi vida’. Xirivella, municipio íntimamente ligado al humor, se reencuentra así con la risa y con las artes escénicas. “Tras el impacto vital del confinamiento, las personas, indistintamente de nuestra edad, necesitamos reír y llorar a la vez, sacudirnos las penas y sentirnos libres de nuevo”, reflexiona Roberto Romero, concejal de Cultura. “Recuperando la actividad escénica, contribuimos además a la reactivación del mundo cultural, singularmente golpeado por la pandemia”, concluye.